Alfredo Ugarte se une a Patricia Maldonado, Raquel Argandoña y compañía para un futuro café concert ojalá en una cloaca que se llamará “es mi opinión”.


Pensé que la cúspide del fascismo este año le correspondería al sorteo navideño de José Antonio Kast invitando a sus seguidores vía Instagram para participar por un libro de la historia de su familia. Ni siquiera sus fans acérrimos e incels le hicieron caso porque la vergüenza tiene límites.

También se candidateó para este momento la salida de Gonzalo de la Carrera al compartir una noticia falsa donde Camila Vallejo, supuestamente, apoyaba la despenalización de la pedofilia.

Pero incrédulamente, el momento más ofensivo de fin de año vino de la mano del Bichólogo, Alfredo Ugarte, a quien conocimos por su participación en programas infantiles como “La Ley de la Selva” y otras intervenciones que realizó durante la primera parte de la década pasada.

El día de ayer, Ugarte entregó diversas opiniones homofóbicas en un programa de comida, donde salió abiertamente del closet discriminador apelando a una frase que los intolerantes abrazaron a modo de justificar su violencia en el último tiempo: “Es mi opinión”.

“Soy conservador porque me gustan la directrices que teníamos hace 30 años. No tengo ningún problema con la homosexualidad. Con lo que tengo problemas es con que darles derecho a los homosexuales que me parece que no corresponden” afirmó para el programa “Con las manos en la masa” de Vía X.


Pero ojo que no se detuvo ahí, también apeló a sus conocimientos de entomólogo para hablar sobre la “naturaleza” de las cosas.

“La condición más importante es la reproducción. La especie que no se reproduce desaparece. Y todas las especies luchan por mantenerse” agregó como una forma de descartar definitivamente la homosexualidad como una vía válida dentro de la biología.

Ya, ahora necesito ir a lo personal porque esto no me lo esperaba.

Tuve una infancia en el campo, cazando ranas y recolectando crisálidas en una cajita inspirado justamente por el Bichólogo Alfredo Ugarte. Los programas nacionales sobre animales proliferaron de tal forma que incentivaron a una generación completa a tomar decisiones respecto a lo que querían “ser cuando grandes”.

Yo miraba, cuando niño, al Bichólogo como un referente de lo que me gustaría ser desafiando los estereotipos que representaba la adultez: sufrir en una oficina, para después sufrir en un taco y continuar con la dinámica durante 365 días al año.

Ugarte representó para parte de una generación una alternativa distinta de vivir: mostrando serpientes de características prehistóricas en televisión para después viajar por el mundo descubriendo las mayores rarezas de la zoología. Sin embargo, tras estos dichos, su figura como referente cultural mediático se perdió gracias a la desilusión que causaron sus dichos también transfóbicos.

Porque el conductor de televisión también se ensañó con Daniela Vega asegurando que el único mérito que tuvo para estar en los Óscar fue ser transgénero.

“El caso de Daniela Vega, para mí es una enfermedad. No tengo nada contra ella. Pero por ejemplo yo vi la película y creo con todo respeto y cariño, no se perecía un Oscar. Creo que se exacerbó el hecho de que ella sea un trans. Es por eso que ganó el premio. No por la calidad de la película. Que me perdonen pero eso es lo que yo siento pienso”, agregó cual Camila Flores.

Ahí quedaste Bichólogo. Pasaste de ser una especie de Nigel Thornberry a la versión masculina de Carmen Madinagoitia -la concejal que vociferaba que Daniela Vega tiene “pirulín”- en cuestión de minutos.

Porque tus dichos no solo ofenden a quienes son homosexuales y confiaron en ti durante su infancia (como yo) si no que también a los familiares y amigos de ellos. Juntos debemos lidiar a diario con la actitudes retrógradas de aquellos que perdieron la vergüenza de hablar estupideces en la política y televisión abierta como Patricia Maldonado, Kike Morandé, Alberto Plaza, Raquel Argandoña, Checho Hirane, etcétera.

La verdad es que estos dichos causaron tanta sorpresa como cuando nos enteramos de que Viví Rodríguez apoyaba a Bolsonaro. Pero bueno, después de todo, tampoco podemos confiar en la figura de un “Bichólogo” que fue rostro e hizo campañas para un mata insectos.