Sabemos que ni un tercio del millón de personas que confirmaron su asistencia al Área 51 llegará realmente hasta el desierto donde según la creencia popular, se encuentran extraterrestres escondidos desde hace casi 60 años.

Sin embargo, no podemos descartar que varios entusiastas sí llegarán a una de las zonas más prohibidas del mundo, despertando las alarmas en el sistema de seguridad estadounidense que envió un comunicado para disuadir a los eventuales asistentes del evento advirtiendo sobre la presencia armada de los oficiales del lugar.

Sin embargo, la humanidad demuestra nuevamente que nos merecemos el calentamiento global al no poder organizarnos para descontaminar playas, luchar contra el hambre o cualquier otra necesidad urgente, porque ahora un grupo no menor de 40 mil personas ha confirmado su ida al Triángulo de las Bermudas justificando que “no pueden desaparecer todos”.

En primer lugar esta iniciativa es muy ridícula por varias razones: no hay ninguna peligrosidad en el área que corresponde al triángulo, ubicado entre Miami, Puerto Rico y República Dominicana.

La leyenda sobre este famoso triángulo, data de 1950, cuando las comunicaciones eran paupérrimas y las condiciones climatológicas difíciles de premeditar. Sin embargo, en los últimos 100 años, se han contado más de 10 millones de viajes por el triángulo y sólo 50 barcos y 20 aviones han desaparecido.

La ciencia ha explicado que el peligro para las embarcaciones que pasan por ese lugar está dado por ser una ola donde las olas pueden llegar a los 30 metros de altura y respecto a los aviones, es porque la zona tiene una profundidad casi infinita entonces si un avión cae ahí no encuentran ni un asiento.

Bueno, nos falta esperar y ver cómo serán las cosas en el Área 51 para tener un destello de lo que podría ser esta situación, donde gente podría perecer en el mar frente a la falta de seguridad en la zona. Este 2019 es un año muy raro.