Tras conocerse los resultados de la última encuesta CEP que muestra solo un seis por ciento de aprobación al presidente Sebastián Piñera, y un amplio rechazo a diferentes actores políticos e instituciones, el cientista político y académico del Departamento de Historia de la Universidad de Santiago, Bernardo Navarrete, calificó las cifras como “un balde agua fría para el gobierno”.
“Esto deja a la administración de Piñera fuera de la discusión del plebiscito y de las negociaciones para las elecciones de gobernadores y alcaldes”, aseguró Navarrete.
El académico indicó, además, que los resultados exhibidos en el sondeo “sacan al Presidente de su rol como jefe de una coalición política y lo dejan solo como Jefe de Estado porque también se le ha criticado su capacidad de dar gobernabilidad al país, a la vez que los partidos y militantes que lo sustentan ya no estarían reconociendo ni un liderazgo político”.
Para Navarrete, más allá que el Mandatario pueda remontar estas cifras negativas en el futuro, “el ciclo de popularidad del presidente se cerró”.
“Dicho de otra manera, no hay capital político para respaldar los próximos dos años, por lo tanto, los partidos de oposición van a querer entenderse más con los partidos de gobierno y, eventualmente, con quien esté manejando la agenda legislativa antes que con el presidente”, señaló el analista.
Otro de los problemas considerados por Navarrete es la baja aprobación de los ministros. “La ministra Cubillos no puede tener ese nivel de reprobación, con solo un ocho por ciento de visión positiva”.
Sin embargo, a juicio del analista, “el gobierno se quedó con poca maniobra para poder hacer cambios de gabinete”.
Crisis total de liderazgo
Respecto a la evaluación a personajes políticos, el académico de la Universidad de Santiago consideró que ya no se debe hablar de los “mejor evaluados” sino de los “menos reprobados”.
“Que estemos hablando de una visión positiva o muy positiva, considerando como techo el 27 por ciento de Lavín, es que tenemos un problema grave de liderazgos. Tenemos evaluaciones positivas que están bajo lo que uno podría considerar aceptable que debería ser el 50 por ciento”, planteó.
“En suma y resta, los resultados de la CEP son un embajador del miedo porque si miramos quienes podrían conducir un proceso de salida, no vemos a ni uno. Y eso es de izquierdas a derechas. Aquí hay una crisis de liderazgo y de la elite política enorme”, sentenció Navarrete.
FUENTE: USACH