Cuando pasan los años, las células senescentes -también llamadas células “zombies” pierden la capacidad de dividirse y aumentan su proporción. En vista de eso, una investigación académica quiso identificar lo que promueve en gran parte la senescencia celular y la aparición de enfermedades en los humanos.

Recientemente, un equipo de investigadores de la Universidad de Pittsburgh y del Centro de Cáncer UPMC Hillman hallaron la manera en que operan las células senescentes, también denominadas como células “zombis”.

Cuando hablamos de las células senescentes nos referimos a aquellas que, con el paso del tiempo, pierden su fortaleza de dividirse y aumentan su tamaño en el cuerpo humano. 

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Teniendo eso en cuenta, los científicos del estudio identificaron que uno de los principales motivadores de la senescencia celular es el estrés oxidativo, además de promover la aparición de enfermedades cardiovasculares y otras relacionadas con la edad.

Foto: Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos (NIH).

En concreto, la investigación publicada en Nature Structural & Molecular Biology dio cuenta que el daño oxidativo en los telómeros es el causante de que se acelere la senescencia celular.

“Se ha propuesto que el daño oxidativo al ADN telomérico causa senescencia prematura al acelerar el acortamiento de los telómeros”, apuntaron los investigadores en el estudio. 

¿Cómo identificaron eso? El equipo decidió usar células humanas que habían sido cultivadas en una placa. 

En ese ejemplar, identificaron que el daño oxidativo en los telómeros provocó que las células se volvieran “zombis” en solo cuatro días, lo que fue mucho más rápido que las divisiones celulares que se requieren para estimular la senescencia celular.

En ese sentido, este hallazgo podría significar un avance en tratamientos médicos que fomenten el envejecimiento saludable, pero también tratamientos que puedan combatir enfermedades como el cáncer.

La principal investigadora de este análisis, Patricia Opresko, académica de salud ambiental y biología química de la Universidad de Pittsburgh, dijo a Infobae que “las células zombis todavía están vivas, pero no pueden dividirse, por lo que no ayudan a reponer los tejidos”.

Por ello, la autora del estudio advirtió que “las células zombis secretan activamente sustancias químicas que promueven la inflamación y dañan las células vecinas”.