El Instituto de Salud Pública (ISP) aprobó la importación y comercialización de dos productos canadienses a base de cannabis: el T100 y TC100.
Los fármacos elaborados por la empresa Tilray están diseñados para aliviar el dolor de personas enfermas de parkinson, cáncer y fibromialgia, aunque el secretario general del Colegio Médico, Luis Velozo, ha señalado que la eficacia de este tratamiento aún no está comprobada.
Los frascos de 25 milímetros serán comercializados desde hoy en dos locales de la farmacia Carmen de Santiago (uno en Providencia y el otro en la Dehesa). El costo de cada frasco, que dura para un tratamiento mensual, es de 210 mil pesos. Se venderán con receta retenida.
Como es una incitativa que está en pañales y solo se trata de un proyecto piloto, tan solo existen 300 dosis de cada versión del fármaco y su forma de uso es oleosa, es decir, en forma de aceite que se administra a través de un gotario.
Los medicamentos T100 y TC100 tuvieron que aprobar un proceso que duró dos años para conseguir las validaciones científico-técnicas de Chile y Canadá, conseguir los persmisos de importaciones del Instituto de Salud Pública y una recomendación del Laboratorio de Farmacocinética y Biodisponibilidad de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile.
A saber, Chile es el primer país de Latinoamérica donde se vende un medicamento de esta índole. “Este es un plan piloto para poder dar acceso a los médicos a un producto con un alto estándar, seguro y que permita replicar resultados que se han obtenido en otros países”, explicó Roberto Roizman, presidente de Alef Biotechnology.
El jefe de la Sección de Estupefacientes y Psicotrópicos del ISP, Carlos Bravo dijo que el permiso para la venta del producto “es una autorización excepcional y provisional, amparada en un artículo del Código Sanitario que contempla la posibilidad de importar medicamentos sin registro sanitario, en una partida limitada.”