Lo primero que veo al entrar, es un libro de una mujer a torso desnudo mirando una mesa de banquete. Es el libro Afrodita, de Isabel Allende. Las páginas retratan cuentos sobre placeres sexuales y culinarios que invitan a la erotización de quien abra su mente a leerlo. El libro cuesta 4.000 pesos, casi un 60% más barato que en cualquier lugar.

La dinámica funciona así: Greenlibros recolecta y recibe libros donados, y los vende a mitad de precio. Y por cada libro que vende, dona uno. Es la primera librería solidaria de Chile.

Seguí recorriendo los acalorados pasillos, cubiertos de los miles de libros que le llegan, producto de donaciones, al día. Hay clásicos magistrales y literatura pop. Hay textos escolares y manuales de medicina. Hay libros desde Cervantes a Pilar Sordo. Hay de todo, pero por suerte, hay más de Cervantes.

GreenLibros, la librería de Recoleta, invita mucho más que las aburguesadas librerías de los centros comerciales. No tiene los grandes estantes de caoba que podemos ver en los mall, pero tiene mística. Tiene historia. No solo personal, sino la carga de cada libro que antes fue leído por quien sabe quien.

Tomé uno de un material entre cuero y terciopelo rojo. Geopolítica decía su título, con cuidadas letras doradas. Arriba del título, su autor: “Augusto Pinochet Ugarte”. Lo solté como si me hubiera dado la corriente. Como ya dije; hay de todo.

Para hacer el recorrido completo se necesita tiempo. Son muchos los temas. Dicen que los más cotizados son los libros para niñ@s y los textos escolares, aunque en esos últimos hay harta pega que hacer. Tienen un equipo borrando todos los resabios de quien tuvo la suerte de conocer el libro nuevo. Incluso borran los que están rayados con lápiz pasta.

La enorme bodega ubicada en Loreto 558, tiene una tienda para el público, un sector donde se estaciona la camioneta que recorre Santiago recolectando las donaciones, otro con las personas que catalogan y ponen precio a los libros. Luego, en el segundo piso están las oficinas y los estantes de los libros que se venden online en greenlibros.com.

Conversamos con Daniela Puig, quien está a cargo de este proyecto.

¿Cómo nace GreenLibros?

Hace 10 años. Con tres amigos que comenzaron a revisar el tema de los textos escolares. Se dieron cuenta que la gente o se los heredaba a sus hermano, los re-vendía o los botaba a la basura. Pero no había una conciencia de la re-utilización.

Por eso comenzaron una campaña en dos colegios para poder re-utilizar estos libros. Pusieron puntos de donación en los colegios Sagrados Corazones de Manquehue y Saint George. Para la primera campaña llegaron más de 2000 textos. Desde ahí no hemos parado.

Y hoy, ¿en que están?

Junto con los textos escolares la gente también donaba libros de literatura o de todo en realidad. Porque la gente a veces intentaba donarlos a bibliotecas, pero muchas veces no reciben libros usados. Otras veces a fundaciones que simplemente no les sirven y el espacio no les daba. Entonces terminaban pasándoles un cacho más que una contribución.

Ahí decidimos hacer alianzas con fundaciones para poder fomentar la lectura. Con fundación Había una vez, con Techo, que tienen pequeñas bibliotecas en campamentos y varias otras. Nosotros les donamos los libros para sus actividades, si nos piden 400 libros de niños, se los mandamos, porque tenemos la política de que por cada libro vendido debemos donar otro a alguna fundación.

¿Dónde se pueden donar libros?

Tenemos más de 40 puntos de libre acceso y sumando colegios y universidades son más de 100. Tenemos un punto en Viña del Mar y nos gustaría abrir sucursales en regiones, pero en la logística se nos hace complicado aún.

¿Qué significa ser una empresa B?

Significa que GreenLibros tiene un impacto social, porque donamos un libro por cada uno que vendemos y hacemos una donación monetaria de un 10% de todas nuestras ventas. También tiene impacto medioambiental, porque reutiliza libros que muchas veces eran botados y además reciclamos los libros que no nos sirven ya se porque están en muy mal estado o porque son revistas u hojas sueltas. Ellos los mandamos a Sorepa, la sociedad recuperadora de papel. Y por último un impacto económico porque vendemos libros a mitad de precio y hacemos una vez al mes ventas de bodega, donde vendemos libros desde 100 a 3.000 pesos.

¿Cuál es el mejor libro que les han donado?

Una vez nos llegaron cuatro tomos del Código Civil Francés de 1839 y también la novela japonesa Genji Monogatari, que es muy difícil de encontrar en Chile. Pero constantemente nos están llegando muy buenos libros. Tienen que venir.