Después de todo un sábado de estudio extremo y aburrimiento decidí bajar Colonia y el resultado fue: más depresión.
Por Constanza Moya.
No tengo amor a la patria y me da un poco de culpa decirlo la verdad. Quizás sí hay hartas cosas que me hacen querer Chile, pero no puedo pensar en ninguna que no sea superficial. Si me hicieran copy-paste a mí, a mi familia y a un par de amigos en otra parte del mundo occidental aseguro que no echaría nada de menos y hasta creo que sería capaz de generar apego por ese nuevo país y sus costumbres. De hecho, siento tanto amor por la lasagna y la comida china que por la empanada.
Me emociona caleta ver a la roja jugar, me siento patriota. A veces la apoyo con pasión, pero con harta menos pasión que con la que apoyo a Pocahontas cuando corre a salvar al John Smith de la muerte, con menos pasión de la que quiero que Hannah se quede con Adam en Girls y con mucha menos pasión de la que sentí al apoyar a los protagonistas de Colonia. Lo que me hace sentir parte de Chile se me acaba tan rápidamente como se me acaba la catarsis después de ir al cine.
Al terminar la película, quedé con un sabor tremendamente amargo por hartas cosas:
- No saber que Colonia Dignidad fue también un centro de tortura.
- Pensar que Emma Watson sabe más de Colonia Dignidad que yo, chilena
- No recuerdo que en los contenidos del colegio en la unidad de guerra fría hayan incluido además de la carrera espacial, el bloqueo de USA a Allende.
- ¿Redujeron finalmente las horas de historia?
- Todo lo que sé de la dictadura lo sé del internet, de los 80 y de lo poco que saben familia y amigos.
- Como no se ná de Chile, no tengo apego por Chile.
- ¿La dictadura ya está como contenido en el currículum de los colegios? No me preguntaron nada en la PSU 2009, creo.
- Contacto pilló a Schaeffer.
- Colonia Dignidad es actualmente un centro de eventos.
- Los 33 tuvo más cobertura mediática que Colonia.
- Emma Watson vino a Chile y no la vi
Eso po. Lo que se respecto al golpe no me lo dijo el colegio, me lo dijeron los 80, la familia de mi pololo y lo que cachan mis papás. Todo cortado y alienado. ¿A alguien no le gusta decir que fuimos parte de la guerra fría? ¿Era sólo mi colegio acaso? Igual, quizás sí pero le he hecho clases a un par de cursos adolescentes y saben tan poco o menos que yo al respecto y odiaban tanto o más que yo el seguir viviendo aquí. Y puta, cómo no voy a sospechar que hay una conspiración detrás para hacernos hiper pasivos y que no nos emancipemos nunca y que evadamos yéndonos a penas tengamos oportunidad?
Qué chucha hago en Chile. En un país en el que tiene que aparecer el tío Emilio a hacer justicia y dar a conocer que Schaeffer era pedófilo. En un país que un director indie alemán le interesa más enseñarnos de historia de Chile que las autoridades a cargo de la educación de nuestro país. Un país que borra la historia convirtiendo un centro de tortura en un centro de eventos.
El saber de la historia de tu país es una de las cosas importantes que te hace sentir parte de tu país, sentirte patriota supongo. Aquí son pocos los que buscan que la gente sepa cosas, les gusta mantenernos bien ignorantes parece. Qué pena que la realidad es efectivamente que somos hartos los que nos carga seguir acá . Me cuesta mucho quedarme en Chile y me duele no sentir las ganas de cambiarlo. Aim sorry. Espero que a los que los formaron con amor a la patria puedan eventualmente hacer con las autoridades pencas lo que hizo la francesa de Bastardos sin Gloria con los nazis y de ahí, reivindicar a todos los torturados y muertos, niños abusados y personas cautivas. Y los cobardes, egoístas reclamones, irnos a la chucha y en una de esas volver con la cola entre las piernas.
Adiós.
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