Nuestro país se llama Chile pero prescindimos bastante de la comida picante. Es más, mientras en el mundo nos asocian con diferentes tipos de pimientos, acá solamente privilegiamos el merkén.

Sin embargo, la comida condimentada con ají es parte del día a día en muchas culturas de América, pero por sobre todo, en Asia. Este es el continente donde más ají se consume en el mundo, y es China el mayor productor con 17 millones de toneladas al año en comparación con México, que produce apenas 2.

Sin embargo, y durante una investigación para averiguar más sobre los factores que pueden incidir en el desarrollo de demencia o enfermedad de alzheimer, la Universidad del Sur de Australia teorizó que la dieta es un factor determinante para que las personas sean propensas a estas enfermedades neurodegenerativas.

Fueron 15 años de estudio que involucraron a más de 4 mil ancianos chinos llegando a la conclusión que aquellos que consumían ají y sus derivados con frecuencia, eran más propensos a desarrollar la enfermedad. Incluso, la tendencia empeoraba si los investigados eran individuos bajos de peso. (Puedes revisar la ficha técnica en este enlace).

El estudio fue una colaboración entre investigadores australianos y la Universidad de Qatar, liderado por el Dr Zummin Shi, que entregó los resultados a la opinión pública.

“El consumo de ají se consideraba beneficioso para mantener el peso corporal y la presión sanguínea según las resoluciones entregadas por estudios previos. Sin embargo, hoy en día descubrimos efectos adversos en las capacidades cognitivas de los adultos mayores”.

La Doctora Ming Li, una de las cinco involucradas en la investigación, señaló que los ajíes estudiados correspondían tanto a los frescos como aquellos molidos y de fabricación industrial (aunque excluyendo la pimienta negra).

“El ají es uno de las especias más consumidas del mundo, pero particularmente popular en Asia. Sucede en regiones de China, como Sichuan y Hunan, donde uno de cada tres adultos consume comida picante todos los días” aseguró.

Sin embargo, el estudio debe ser corroborado y para eso se necesitan un par de años más de estudio. La enfermedad de alzheimer viene en alza, y los estudios son necesarios para poder tomar medidas paliativas a tiempo y entender mejor la enfermedad.

Sin embargo, existen muchos factores que influyen en el desarrollo de la demencia: nivel socioeconómico, contextura física y como no, también los factores genéticos y culturales. Por eso por mientras que se corrobora esta información, aprovecha de comerte ese pebre tranquilo y sin culpa.