Porque tu credibilidad se va a la mierda si después de mentir y destruir evidencia, sales a dar explicaciones sobre el asesinato que cometiste, haciendo cosplay de Batman.

Si terminaste de ver el video recién, supongo que al igual que todo Chile en estos momentos estas con varias dudas y más confusión que certezas respecto a lo sucedido.

El adulto que acabas de ver vestido con una polera apretada de Batman está muy, muy lejos de una Comic Con o de un puesto de venta de comics en el Eurocentro, lugares donde esa vestimenta podría ser considerada ad hoc al tiempo y espacio.

Por tiempo y espacio nos referimos a que el contexto desde donde el ser humano identificado como Carlos Alarcón, ex sargento del Gope de Carabineros, está hablando es una comisaría, la 2º de Temuco, donde está detenido como el presunto autor del asesinato del comunero mapuche Camilo Catrillanca. Alarcón habría sido quien le disparó a Catrillanca por la espalda mientras manejaba totalmente desarmado un tractor en compañía de un niño de 15 años.

Alarcón es también el autor de esta siguiente declaración que apareció en la prensa el domingo en la mañana. La puedes leer e intentar entender acá, pero te advierto que es un tanto confusa, aunque si queda clarísimo que ni Camilo ni su acompañante en ningún momento fueron una amenaza para los policías.

Luego, más en la noche, y en un registro que se ha viralizado esta mañana, el mismo ahora ex carabinero, dado de baja, imputado y en prisión preventiva en una comisaría, aparece entregando un mensaje a sus compañeros, o ex compañeros, del Gope.

Una de las dudas razonables es por qué un adulto, que no está en una Comic Con ni vende historietas ni es Salfate, se viste así. O pico con que se vista así, pero si está a cargo del manejo de armas de grueso calibre da un poco de nervio darse cuenta que es un persona que no tiene muy resuelta su infancia ni su separación de la ficción con la realidad.

Dos, pero sobre lo mismo, loco le estás mandando un mensaje a tus compañeros respecto de una situación en la que estás literalmente con la mierda hasta el cuello. Es bien probable que la institución que tanto amas te haga cargar con todo el peso de una política de Estado. Respétate un poco, nadie te pide un terno y corbata porque estás preso, pero aparecer disfrazado de superhéroe nos da a entender que no comprendes realmente lo grave de la situación en la que estás.

Tres. La primera reacción que uno tiene razonablemente al ver el video es el shock que produce no escucharlo en ningún segundo siquiera decir el nombre de Camilo Catrillanca ni de mencionar a su familia. Su dolor, explica, tiene que ver con “el daño a la institución”. Es decir, el adoctrinamiento de estos sujetos es tal que se les bloquea por completo la capacidad de sentir empatía por la persona a la que le reventaste el cráneo de un balazo, pese a reconocer que no iba armado ni con una resortera, ni su familia.

Cuatro. En estos momentos hay una investigación en curso respecto de por qué diablos un detenido tiene acceso a un celular (cosa bastante imbécil y realmente lo menos grave del asunto), pero lo que realmente es grave es que según Alarcón “hay gente que los hizo mentir y dar declaraciones falsas” y “hay cosas que falta que salgan a la luz”. Eso es lo que hay que esclarecer, más que si tenía un celular guardado en el poto o si algún Robin le prestó uno.