Partiendo de la base de que si no fuera por la fiscalización de las rrss habrían pasado coladas.


La televisión enfrenta una crisis de audiencia que repercute de forma transversal en sus noticieros. Los usuarios han elegido diferentes formas de buscar información frente a la falta de confianza existente dentro de los conglomerados acusados en diversas oportunidades de faltar a la verdad.

Se pensaba que las fake news eran parte del universo digital y que se comparten por cadenas de WhatsApp entre gente mayor, pero los noticiarios y sus magnos recursos también emplean esta técnica muchas veces de forma inescrupulosa.  Tal fue el caso del Liceo 1 en noviembre del año pasado, cuando Teletrece aseguró que alumnas del recinto estaban siendo adoctrinadas bajo el alero de la extrema izquierda.

La nota realizada por el periodista Alfonso Concha, titulada “¿Adoctrinamiento en Liceo 1?” aseguraba/planteaba la-pregunta sobre alumnas siendo adoctrinadas por individuos pertenecientes al Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), algo rechazado categóricamente por los apoderados que no tardaron en demostrar su indignación en un comunicado y el caso llegó a la justicia, donde la Corte Suprema terminó por determinar que el reportaje era “serio”.

Hubo protestas en las afueras de Canal 13, pero quienes cumplieron un rol que masifica este tipo de malas prácticas, fueron las redes sociales.

Las quejas que llegan al Consejo Nacional de Televisión (CNTV) pocas veces se traducen en medidas realmente efectivas para que estas situaciones de negligencia no se repitan, quedando el rol fiscalizador entre la propia audiencia.

Tal fue el caso de Canal 13 cuando esta semana proyectó una imagen de Michelle Bachelet mientras sus conductores comunicaban las últimas novedades respecto al apagón general de Venezuela. Los usuarios reaccionaron de inmediato y pese a que hubo una disculpa rápida frente a la situación, las medidas contra el canal serán tomadas pese al aparente error.

Por un error en la operación gráfica se mezcló desafortunadamente una imagen de la expresidenta con la gráfica alusiva al tema de los apagones. La dirección de prensa de Canal 13 lamenta la molestia que pudo generar esta situación, como también las lecturas erradas que se pudieran concluir de este hecho fortuito” Sostuvo Constanza Santa María.

Pero el rol de las redes sociales para destapar situaciones poco éticas en tan solo un instante, se vio de forma explícita cuando Mega emitió imágenes de disturbios en Valparaíso durante la marcha del día de la mujer. Sin embargo, una persona que se encontraba en el lugar de los hechos, registró en su celular que no había disturbio alguno y que el canal mentía con imágenes de archivo antiguas.

Pese a lo anterior, y gracias al video viralizado donde se ve que claramente, los alegatos en contra del CNTV ya alcanzan las 700 denuncias y el editor de contenidos del canal fue desvinculado.

Incluso Fernando Paulsen, periodista, aseguró que “es imposible que se confundan imágenes de archivo con imágenes en vivo de forma accidental”.

Al parecer los ejecutivos y productores de noticieros, al igual que los mismos periodistas, deben aprender a que ahora coexisten con un órgano fiscalizador mucho más prolijo que los conocidos de antaño, y provienen justamente de la audiencia a la que dicen informar.