Fred Dixon, presidente y CEO de NYC & Company, estuvo en nuestro país como parte de una gira para promocionar la capital mundial tanto para turistas como para estudiantes.
“Cuando me informaron que íbamos a América Latina, lo primero que dije fue que deberíamos ir a Chile sí o sí”, de esta manera comenzó su conferencia en el Hotel Ritz Carlton de Santiago el hombre tras la coordinación de la imagen, el turismo y las actividades que se realizan en la capital mundial, Nueva York.
Esta frase, más que pretender encantar a los presentes (todos chilenos) tiene sus razones muy sujetas a los hechos, como por ejemplo, que Chile es el único país de América Latina que cuenta con el beneficio de Visa Waiver y que también el número de chilenos que visitó Nueva York en 2016 alcanzó la cifra de 63 mil personas.
Pero las estrategias para atraer o mantener los turistas en Estados Unidos y en particular en Nueva York, han tenido que tomar nuevas rutas. Esto debido a las declaraciones del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, quien desde que inició su carrera hacia la Casa Blanca, se ha caracterizado por sus fuertes declaraciones ya sean en vocerías o a través de Twitter que han polarizado a la sociedad norteamericana exaltando los movimientos de supremacía blanca, el rechazo a los latinos y las críticas y ataques a la comunidad LGBTI.
Fred Dixon ha liderado una campaña para que Nueva York “de la bienvenida al mundo” y que, a pesar de todo, sigue siendo la capital mundial que cobija las libertades, la diversidad y y las oportunidades.
Ante esta realidad, el plan de Fred es ambicioso. En los próximos años Nueva York será escenario de una fuerte alza en la edificación pública y privada aumentando su capacidad hotelera, la remodelación de un museo junto a la estatua de la libertad, la construcción de un parque subterráneo, y ser la sede del World Pride 2019, siendo Nueva York la primera ciudad de este lado del mundo en protagonizar este evento.
Como afirma Fred, Nueva York se viene con todo y al terminar su charla, se tomó unos minutos para conversar con nosotros y contestarnos algunas preguntas en relación a la administración Trump y cómo la capital mundial se hace un espacio en un Estados Unidos que a ojos del mundo parece más cerrado y peligroso que antes.
¿Cómo convences a los Latinoamericanos que es posible ir tranquilo y sin miedo a Nueva York?
Lo que oímos desde Washington DC hoy en día es algo que no nos gusta y por ende estamos muy atentos a lo que viene de ahí, pero a pesar de eso creo que la mayor parte de las grandes ciudades en los Estados Unidos se encuentran en la situación de total apertura para recibir turistas o estudiantes, especialmente Nueva York. No existen problemas en NY. Es una ciudad muy segura, de hecho, es la ciudad más segura de América del Norte en este momento y su taza de crimen es la más baja.
¿Y un latino y gay?
Yo soy gay y me siento totalmente cómodo en Nueva York. Nunca he tenido ningún problema, una situación de miedo o malestar. Realmente es solo una minoría la que está a favor de las cosas que el gobierno dice o hace.
Este proyecto en el que Nueva York da la bienvenida al mundo nace a la par de la era Trump ¿Es una coincidencia?
La campaña de dar la bienvenida al mundo comenzó con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y luego nos siguieron otras ciudades como San Francisco, Los Ángeles y Miami, las ciudades grandes. Te cuento además que Nueva York se pronunció a favor de las fronteras abiertas para el turismo. Son tiempos interesantes, claramente. Pero estamos confiados en que esta era pasará pronto. Nueva York fue la primera ciudad en hablar en contra del presidente Donald Trump
¿Crees que la era Trump no durará más de 4 años?
Eso espero. Él es de NY y es alguien a quien conocemos y estamos sorprendidos por todas las cosas que salen desde su boca y desde su cuenta en Twitter, es chocante.
¿Qué pasa con el alcalde de Nueva York, De Blasio, pues parece ser un antítesis de Trump, cuanto está él en todo este proyecto?
Tanto el alcalde como el gobernador son fuertes defensores y protectores de nuestros residentes en Nueva York y de nuestros visitantes. Ambos han salido a dar la cara y a decir libremente sus discrepancias con el gobierno. No se han quedado callados.
¿Nueva York es la excepción de los Estados Unidos?
Siempre he creído que Nueva York es algo así como constantemente la excepción.