Este jueves, hoy, Bronko Yotte lanza su nuevo EP “Deli” en el Club Chocolate. Todavía quedan algunas entradas y las encuentras acá.

De ese trabajo ya conocimos Posta y Swerte pero hace unos días publicó el primer videoclip y es para la canción Hush Papi que puedes ver a continuación.

Además, el trabajo tiene un documental que registró su creación en Nueva York el año pasado. Los dos capítulos los encuentras a continuación:

Capítulo 1: Cinco días, cinco canciones

Capítulo 2: Confiar en la Ciudad

Ya. Pasados todos los anuncios vamos a lo que nos convoca. A propósito de la boicoteada PSU por parte de los estudiantes secundarios, la Aces y el movimiento “No + PSU”- sus motivos acá y nuestra entrevista al vocero de la Aces Victor Chanfreau acá– quisimos hablar un ratito con él.

Se sabe pero si no lo sabes te cuento que Bronko Yotte en su otra vida como Felipe Berrios fue profesor de Lenguaje. Por eso quisimos hacerle un par de preguntas sobre el tema de la semana.

¿Te esperabas el alcance que tuvo el movimiento “No + PSU”?

Me lo esperaba, sí. Es que estaba anunciado, y hay que ser muy
despistado o derechamente descarado para no darse cuenta de que no
hemos vuelto a la normalidad. Cambios de fondo no ha habido, más que
el plebiscito próximo, y hasta eso está en cuestión esta semana.

¿Compartes las críticas de los estudiantes secundarios respecto a la prueba?

Comparto las críticas, pero lamento que tengan estas consecuencias,
aunque no los responsabilizo a ellos. La responsabilidad la tiene el
gobierno por jugar al desgaste para contrarrestar la crisis social,
sin responder significativamente a las demandas. Y, querámoslo o no,
eso tiene costos, sobre todo para los sectores populares.

¿Qué opinión te merece la frase de “no es la forma” que expresaron los críticos del boicot a la prueba?

La comparto un poco, pero hasta que tomo todo en cuenta. Es que mi
reflexión va en dos niveles: pienso primero en lxs cabrxs que no
pudieron dar la prueba después de estar pensando en ella por años. Es
un tema crucial para muchísimos adolescentes chilenos y sus familias.
Pero en un segundo nivel, más profundo, pienso justamente en que no
puede ser que alguien pase toda su adolescencia tan pendiente de una
prueba estandarizada, y que el colegio mismo no baste, y que se se
haga necesario el negocio de los preuniversitarios. A mi parecer, más
que el instrumento mismo de medición, el problema es lo que este
produce en los establecimientos y sobre todo en lxs estudiantes. La
PSU es una preocupación que permea toda actividad académica en la
Media. Por eso compiten los colegios, por eso tapan a facsímiles a los
cursos por varios semestres. Y lo que le interese o apasione en
clases a lxs cabrxs da lo mismo si no les va bien en los ensayos de
PSU. El conocimiento se devalúa, y la autoestima se va a pique. He
conocido estudiantes brillantes, sensibles, que dejan de creer en sí
mismxs por una prueba. Esta es una de las razones fundamentales por
las que dejé de ser profe, de hecho.

Entendiendo que el problema de la PSU es la punta del iceberg de todo un sistema de educación desigual ¿Qué proceso de selección para la educación superior te parece que habría que implementar en el corto plazo?

Se me ocurre que a la prueba estandarizada que mide conocimientos y
habilidades, mejorada y rendible más veces en el año, se agregue un
formulario de postulación a cada carrera, parecido a como se postula a
una beca, o una visa. Así se fomenta que lxs estudiantxs, durante su
educación media, se empoderen de las áreas de estudio que aman, y
reconozcan de verdad el rol social que cumplirían. Así la universidad
recupera peso también, la hacen sus estudiantes, y en ningún caso es
un “Quinto Medio”.