El hecho ocurrió en Wurzburg y dejó cuatro heridos. El atacante, que estaba armado con un hacha, fue abatido por la policía.

El Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad del ataque que protagonizó un joven afgano de 17 años que llegó a Alemania como inmigrante y que este lunes atacó a los pasajeros de un tren con un hacha antes de ser abatido por la policía.

El anuncio del EI llegó en un boletín publicado en arabe e inglés a través de la agencia Amaq News Agency luego de que las autoridades alemanas dijeran que sus investigadores habían encontrado en la habitación del adolescente una bandera dibujada a mano de ISIS, al igual que notas en donde se reconocía como un radical de la causa.

El hecho agudiza el conflicto que existe en Alemania con la gran cantidad de inmigrantes que piden asilo en ese país y que según algunos sectores representan una amenaza para la seguridad. Apróximadamente 1 millón y medio de migrantes ha postulado a asilarse en Alemania en los últimos 18 meses, pero el entusiasmo inicial con el que fueron bienvenidos se ha rápidamente transformado en preocupación.

Aunque el flujo ha diisminuido, Angela Merkel ha debido hacer frente a la creciente presión de los sectores anti-inmigración, sobre todo luego de que grupos de africanos del norte fueran apuntados como principales sospechosos de los cientos de ataques sexuales ocurridos en Colonia el año nuevo pasado.

En el comunicado de ISIS, se asegura que el ataque del hacha fue perpetrado por un “soldado del Estado Islámco” como respuesta al llamado a agredir a los países que están en guerra con ellos.

El adolescente, cuya identidad no ha sido entregada, llegó a Alemania el año pasado y solo. Las autoridades creen que el joven actuó absolutamente solo también. Algunos testigos del hecho declararon que el joven gritó “Allahu Akbar” antes de lanzarse con un hacha contra los ocupantes del tren, dejando a cuatro lesionados, dos de ellos con riesgo vital, y decenas de pasajeros en shock. Mientras el atentado ocurría, uno de los pasajeros accionó el freno de emergencia del tren. Cuando el agresor intentó huir, se encontró con la policía. Según testigos, se lanzó con el hacha contra ellos, siendo inmediatamente abatido.

Los cuatro heridos son todos parte de un mismo grupo familiar.