La UDI no es un Partido Político feminista, la UDI es un partido político machista y misógino, así lo ha demostrado históricamente, y no por tener a un par de mujeres a la cabeza dejará de serlo.

Por Frente Feminista Movimiento Autonomista

Hace unos días Jacqueline Van Rysselberghe señaló: “Entendiendo el feminismo como el movimiento que surge para lograr igualdad de derechos entre hombres y mujeres, claro que la UDI es un partido feminista. Tanto es así que la UDI es el único partido que tiene a una presidenta que es mujer” a el diario El Sur.

La mirada que tiene y nos presenta la derecha constantemente sobre el lugar que ocupamos las mujeres en la sociedad, en la política, en la vida, es siempre vista desde la perspectiva de la inferioridad y el proteccionismo, desde la superioridad patriarcal, donde las mujeres somos la compañía, el agregado, pero nunca las protagonistas.

Tampoco somos, como es lógico, sujetas de plenos derechos y solo “nos conceden”- prácticamente haciéndonos un favor – algunos de estos derechos, en cuanto a ellos no les afecta ni los tensiona en lo absoluto.

La UDI, partido fundado por los más conservadores representantes de la derecha chilena, ha abogado, históricamente por mantener el orden social, centrado en la defensa de la familia nuclear dentro del matrimonio heterosexual, reforzando que la reproducción social (las labores de cuidados y prácticas asociadas a lo reproductivo) descansen en lo que históricamente se conoce como la división sexual del trabajo, asunto que se encarga de perpetuar roles de género rígidos y tradicionales.

Asegurar la reproducción estable y gratuita de la fuerza de trabajo de las mujeres en el capitalismo. Sistema, que es parte fundamental de la mirada ideológica que este partido ha luchado por perpetuar desde su origen.

“(La mujer) está obligada siempre a tener el hijo, en toda circunstancia, como parte de la cruz que Dios pueda colocar al ser humano. La madre debe tener al hijo aunque este salga anormal, aunque no lo haya deseado, aunque sea producto de una violación o, aunque de tenerlo, derive su muerte. Una persona no puede practicar jamás legítimamente un aborto”, argumentaba Jaime Guzmán (fundador de la UDI), según consta en las actas oficiales de la Comisión Constituyente del 14 de noviembre de 1974.

Entonces cuando hablan de derechos reproductivos, este supuesto feminismo que ahora enarbolan, no se evidencia en lo absoluto. Reducen a la mujer y a la capacidad de decidir sobre su sexualidad y su cuerpo a ser los envases y como dijera su senadora Ena Von Baer a que únicamente sea quien “…le presta el cuerpo en el fondo, le presta el hogar a esa vida…”.

En esta ocasión, su presidenta nos informa que la UDI es feminista, que no hay mujer que no lo sea. Pero nuevamente vuelve al mismo relato que la derecha ha repetido como mantra y que los hizo en su momento avalar, por ejemplo, el bus de la vergüenza, que el feminismo es una ideología, que es un movimiento de extremos y que finalmente la lucha feminista tergiversa las “verdaderas luchas” de las mujeres.

Entonces, ¿a qué feminismo adhieren, de qué feminismo nos hablas Jacqueline?

Desde esta otra vereda, preferimos hablar de un feminismo activista.

Un feminismo que no juzgue las decisiones que las mujeres tomen libremente sobre sus cuerpos.

Un feminismo que utiliza distintas estéticas para salir a luchar contra las distintas opresiones que vivimos en una sociedad estructuralmente organizada desde el patriarcado.

Un feminismo que lucha por todos los cuerpos feminizados, sin distinción de raza, clase, género.

Un feminismo que lucha por alcanzar la plena emancipación de las mujeres, pasar del estado de objeto históricamente construido a través de la mirada masculina universalizadora, a ser sujetas históricas, autónomas, diversas y complejas, con la capacidad de tomar sus propias decisiones sobre su cuerpo y su vida. Y aquello no sólo trata de asignar mejores salarios, sino de re-pensarnos y trabajar de manera colectiva para transformar las condiciones materiales y la precarización de la vida en general a la cual nos ha llevado el sistema económico-social imperante. Porque, ante todo, el declararse feminista es una apuesta revolucionaria, transformadora de lo personal, que es a su vez político.

Para concluir, nos queda enfatizar que la UDI no es un Partido Político feminista, la UDI es un partido político machista y misógino, así lo ha demostrado históricamente, y no por tener a un par de mujeres a la cabeza dejará de serlo.

El feminismo es revolucionario, y no sólo desde un punto de vista material, sino que sumamente simbólico

Busca la transformación a nivel cultural, educativo, institucional. También desde la forma de entender el poder, de hacer y encarnar la política y lo político.

La discusión que plantea Jacqueline no solo reduce al feminismo a igualdad, sino que plantea una regresión en el tiempo, no se sitúa en el actual contexto histórico, sino que representa la idea de la historia entendida en la escolarización en donde no se reconoce el acontecer presente.

Nuestra lucha Jacqueline, es mucho más profunda que la igualdad, como dijo Silvia Federici “la igualdad es un término que congela el feminismo, decir sólo que luchamos por la igualdad es decir que queremos la explotación capitalista que sufren los hombres”.

Mientras ustedes, desde la UDI sigan avalando el neoliberalismo y el capitalismo, su feminismo queda circunscrito a un simple “igualismo”.

Nuestra lucha es más profunda y apela a erradicar todas las formas de violencia y por sobre todo, busca que las mujeres podamos emanciparnos de todas las opresiones.
Queremos gobernar y construir una sociedad feminista, nos hartamos y de aquí no paramos.