En Colombia existen autoridades que deponen usan recursos mediante ideas poco ortodoxas como lo hace Joaquín Lavín en Las Condes. Resulta que uno de los países más poblados de América del Sur -con casi 50 millones de habitantes- superando a Venezuela, Chile, Perú, Bolivia y Argentina entre otros, tiene un serio problema en lo que respecta los embarazos adolescentes.

La falta de información y educación sexual conlleva a que niñas de entre 12 a 16 años sean madres casi por obligación, puesto que la legislación permite el aborto en tan solo tres causales (básicamente las mismas existentes en Chile).

En Colombia, el 20% de los bebés que nacieron en 2018 fueron de madres entre los 10 y 19 años, según el departamento nacional de estadística.

Joaquín Lavín ya había implementado esta medida en el colegio San Francisco del Alba para estudiantes de segundo medio. La guagua robot llora si no la alimentan, cambian de pañal, o le ponen atención, siendo un tamagotchi versión molesta que disuade a los jóvenes de tener bendiciones y cuidarse más antes de tener relaciones sexuales.

https://twitter.com/LavinJoaquin/status/903277405762183170

Pero la idea no es nueva ni original del alcalde de Las Condes, de hecho, Colombia se convirtió en el país número 89 en implementar la medida con resultados difusos. Al ser una medida reciente y prácticamente nueva, los estudios sobre su efectividad son escasos.

“Esta experiencia fue demasiado dura porque ser mamá o papá no es fácil. Es algo, ¡ay no, es horrible, horrible! Además, el bebé no para de llorar y debes estar como siempre al cuidado de él” sostuvo Susana Oertegón de 13 años, que llamó a su hijo robot Tony Stark.

Más de 1.200 menores han recibido los cursos en Caldas, donde cerca del 15% de la población tiene entre 10 y 19 años.

Sin embargo, esta metodología ha demostrado en poco tiempo presentar efectos contrarios. The Lancet investigó el año 2016 que las niñas australianas que participaron en el programa de bebés robots fueron más propensas a quedar embarazadas y a abortar después del ejercicio.

Los impulsores de esta medida aseguran que de nada sirve tener a las guaguas robóticas en el programa si no se complementan con clases de educación sexual. Cabe recordar que nuestro continente es el que presenta las mayores tasas de embarazos adolescentes después de África.