Las falta de estudios sobre los efectos de la marihuana en los recién nacidos genera debate entre la comunidad científica.
Estudios realizados en Estados Unidos dan cuenta sobre los posibles efectos de fumar marihuana durante el embarazo y si bien las investigaciones requieren de mayor material para apoyar sus hipótesis, no se descarta que el uso de marihuana en embarazadas conlleve a diferentes riesgos.
Un gran número de estados ha legalizado el uso de marihuana tanto recreacional como terapéutico. Al mismo tiempo, las mujeres que fuman marihuana estando embarazadas o en periodo de lactancia incrementaron conforme se ablanda la legislación respecto al uso y tenencia de cannabis.
En 2017 un estudio efectuado por JAMA desglosó los resultados de exámenes de orina de 280 mil mujeres embarazadas en el norte de California, donde la marihuana es legal desde 1996. El estudio demostró que, en 2009, 4% de las mujeres dentro del testeo usaron marihuana. En 2016, el número subió a 7%, y se estima que las cifras para este año se incrementen luego de que California aprobase el uso recreacional de la marihuana.
Algunas de estas mujeres -según sugiere la misma investigación- usan marihuana para tratar sus náuseas matutinas. El reporte, publicado el 20 de agosto de este año por Internal Medicine, concluyó que las mujeres que presentan vómitos y náuseas durante su embarazo son 4 veces más propensas a consumir marihuana para aliviar estos síntomas.
Con esto, queda claro que definitivamente existe un grupo de mujeres que usa cannabis durante su embarazo. Es sabido que hay componentes de la marihuana que son capaces de llegar hasta el feto cruzando la placenta (y a través de la leche durante el periodo de lactancia).
¿Pero qué ocurre realmente cuando el feto se encuentra expuesto a estos componentes?
Esa es la pregunta que la Asociación Americana de Pediatría intenta responder en un esfuerzo por entregar información a las mujeres mediante publicaciones respecto a cómo el consumo de marihuana afecta a la madre y al feto durante el periodo de gestación.
Si bien parece una mala idea exponer a los fetos en desarrollo a la marihuana, la ciencia no ha podido respaldar esta información y las investigaciones al respecto son frustrantemente acotadas. Algunos estudios señalan resultados que indican bajo peso y mayor necesidad de cuidados para los recién nacidos. En las madres, el uso de marihuana se asocia también al riesgo de padecer anemia. Pero otros estudios aseguran que no existe tal riesgo.
El tema -y cualquiera que involucre el uso de drogas durante el desarrollo del embarazo- es difícil de estudiar. Las razones éticas previenen a los científicos de recomendar el uso de marihuana o abstenerse de ella, siendo estas contradicciones claves para realizar un estudio sólido como se requiere en este caso. Esto deja que la investigación se limite tan solo las mujeres que han reconocido usar marihuana durante el embarazo, porque existen diferentes factores que pueden afectar el desarrollo embrionario sin estar ligadas al cannabis necesariamente.
Sin embargo, pese a que la Asociación de Pediatría acusa una “investigación limitada” existen diferentes pistas otorgadas por estudios observacionales realizados en animales con el fin de concientizar a las mujeres antes de usar marihuana durante el periodo de gestación. Hay que agregar también la gran cantidad de THC que tiene la marihuana hoy en día -superior a la de décadas anteriores- y cómo este componente puede afectar el desarrollo de los fetos en desarrollo; las toxinas y pesticidas usadas para fortalecer la planta también son un factor de riesgo que puede conllevar a mayores problemas.
Estas preguntas son más recurrentes a medida que es más fácil conseguir marihuana legalmente y más mujeres embarazadas la utilizan. Con suerte, este tipo de cambios permitirá a los científicos tener una investigación completa sobre los efectos de la marihuana durante el periodo de gestación.
*Este artículo fue traducido desde Science News. Puedes leer su versión íntegra aquí.