Audrey Tang se define como una “hacker cívica”, una “anarquista conservadora” y es la primera persona trans en alcanzar un cargo así de alto en Asia. La comparación con White Rose de Mr. Robot es inevitable.
Audrey (35) ha dedicado buena parte de su vida a desarrollar la llamada “anarquía de la red” y tiene un coeficiente intelectual de 180. Sumado a que es la primera persona trans en asumir tan alto cargo, el nombramiento es histórico.
Taiwán es el país asiático que mayor apertura tiene en cuanto a los derechos LGBT, y podría convertirse en el pionero en legalizar el matrimonio igualitario. A lo anterior se añade que Tsai Ing-Wen es la primera Presidenta de la isla, por lo que el país se erige como un promisorio ejemplo para el resto del mundo.
Audrey aprendió a programar sin utilizar un computador. “Amaba las matemáticas y un día me encontré en casa un libro sobre programación. Dibujé una computadora en un papel, apreté los botones y escribí lo que habría producido la máquina. Así aprendí. Programar se convirtió en una manera de pensar”.
A los 12 años se fue a vivir a Internet y abandonó la educación para adoptar el sistema de homeschooling. A los 16, ya tenía su primera empresa: un buscador de música en chino mandarín que vendió cuando alcanzó la mayoría de edad.
Acostumbrada a trabajar en Silicon Valley y de codearse con la crema de la crema en términos de tecnología, Tang se dedicó de lleno a la vida pública desde el 2014. Es así cómo se transformó en la ministra más joven de Taiwan.
Liderando la cartera digital, el propósito de la ministra es atender “a los que sirven utilizando la tecnología digital para resolver problemas e impulsar los sectores científicos y tecnológicos reforzando el diálogo y la cooperación entre los sectores públicos y privados a la vista de todos. No voy a ser ministra de nadie ni voy a servir para hacer propaganda gubernamental. Quiero ser un ‘canal’ que permita ampliar las combinaciones que ofrece la fuerza y la inteligencia de Internet”.
Por supuesto que Audrey, además de ser una defensora férrea del derecho a acceder a la tecnología, también comparte las ideas de la presidenta de Taiwán en la lucha por los derechos de los aborígenes y abolir la pena de muerte en la isla.
En este punto, y si eres fanático obseso de Mr. Robot como nosotros ya te saltó a la cabeza la comparación con White Rose, líder transgénero del grupo de hackers más peligroso del mundo, Dark Army.
El parecido es asombroso.
It’s happening.