“El objetivo es visibilizar la violencia extrema que experimentan las mujeres en esta sociedad patriarcal”, nos dijo Claudia Neira, cuya hija de solo 6 años fue asesinada por su ex.
Este lunes comienza una semana clave para el feminismo y el movimiento de mujeres en Chile. Luego de meses de organización, los colectivos y ONG dedicadas a impulsar y alzar las voces de las mujeres y de los feminismos llega a una semana clave que culminará el 8 de marzo con una masiva marcha y Huelga Feminista.
Hoy, diversas estaciones del metro amanecieron con nuevos nombres para conmemorar el trabajo de mujeres feministas, de su historia y su activismo.
Participaron cerca de 200 mujeres de las Brigadas de Arte y Propaganda de la Coordinadora Feminista 8M, quienes se levantaron a las 5:00 AM para moverse por 46 estaciones del Metro de Santiago.
“Este Súper lunes feminista tiñó de morado un hito clásico de la vida de Santiago para mostrar la cuenta regresiva de la huelga. Mostramos nombres de mujeres que forman parte de la memoria histórica feminista y por lo mismo de nuestra vida actual, pero que no son parte de la ciudad que habitamos. Queremos mostrar que las mujeres tenemos derecho a la ciudad, somos parte de la vida pública y reivindicamos una memoria histórica feminista”, señaló Alondra Carrillo, una de las voceras de la Coordinadora Feminista 8 de marzo.
En la estación Baquedano apareció nombre de Violeta Parra, en Universidad de Chile el de Elena Caffarena y en Cerrillos Luz Donoso.
Para las activistas son muchas las mujeres que han pasado desapercibidas, silenciadas, calladas, torturadas con el yugo del patriarcado, por lo que no están en los libros y su obra se oculta.
La estación de metro Irárrazabal amaneció con el nombre de Javiera Neira, la joven asesinada por su padre por defender a su madre, Claudia Neira, luego de que éste no respetara la orden de alejamiento impuesta por Tribunales y entrara a su departamento.
Mientras apuñalaba a su madre, Javiera trató de separarlos y fue ahí cuando el hombre la tomó y la lanzó desde un séptimo piso. Hoy Claudia fue una de las activistas que se movilizó junto a la Coordinadora para que el nombre y la historia de su hija se recordara y se tome como ejemplo y se visibilice la vida de las mujeres sobrevivientes de femicidios.
“Estamos impulsando que se instaure el 19 de diciembre como el día nacional contra el femicidio. El objetivo es visibilizar la violencia extrema que experimentan las mujeres en esta sociedad patriarcal. Pero por sobre todas las cosas incidir en la agenda legislativa para tener leyes que se adecuen a los estándares internacionales y que permitan modificar la figura del femicidio y del maltratador”, dijo Claudia Neira.
Roxana Florvil Gómez, familiar de Joane Florvil, recibió con emoción la noticia. La estación de metro de Conchalí apareció con el nombre de Joane. “Esto a nosotros como familia nos reconforta porque el caso de Joane todavía no tiene justicia, y eso significa que el pueblo aún la recuerda; y también tiene en su mente lo dramático y los hechos que cometió el Estado de Chile contra Joane. Nosotros como familia esperamos que se haga justicia y que nunca más en Chile vuelva a existir un caso como este donde existió discriminación, racismo, abuso de poder y, lamentablemente, terminó con la muerte de Joane”, dijo.
Cuando a Joane la encarcelaron, le quitaron a su hija y se la llevaron a un centro del Sename.
Nuriliz Hermosilla, de la agrupación de justicia por Macarena Valdés, “Hacemos esto porque la historia ha sido escrita por y para el patriarcado. Desde los nombres de las calles, los nombres de los próceres, lo que se enseña en historia en este país, con lo que se ideologiza a nuestros hijos es una historia patriarcal de dominio de los hombres ricos, blancos, caucásicos sobre el resto de la población, principalmente mujeres puertas adentro e individuos racializados, otros géneros, indigenas, pobres, todos ellos subalternizados y sus luchas han sido escondidas. Para nosotros Macarena Valdés es una heroína”.