Gaga: Five Foot Two, disponible en Netflix, es un retrato honesto de una artista, mujer e icono feminista y LGBTIQ+, que lo ha dado literalmente todo por su carrera y su familia.
“Quiero hacer lo opuesto de lo que todos piensan que voy a hacer. Todos piensan que voy a salir en un puto trono con un vestido de carne. Con 90 hombres con el pecho al aire, y unicornios, y cosas por el estilo. Y que al final haré algo escandaloso, algo escandaloso. Ni se parece a lo que vamos a hacer”.
Una sala llena de gente, algunos presencialmente y otros por video llamada, asiente ante las palabras de una joven rubia, una con una cara muy conocida, que lleva más de una década en la industria del entretenimiento. También, así se refiere al tremendo show de medio tiempo que iba a ocurrir en un futuro, específicamente el 7 de febrero de 2017, durante el Superbowl 50 y que catapultó a Lady Gaga como artista certificada de estadio.
Pero Lady Gaga también es Stefani Germanotta, una chica con ascendencia italiana de New York, una historia familiar potente detrás, una enfermedad sin explicación que le provoca insoportables dolores físicos y un reciente quiebre amoroso. Una artista que no parece tener un respiro.
Es en la música y en los shows repletos de fans, que Lady Gaga encuentra momentos de paz y lugares para sanar, u olvidar por un momento los malestares que siente en su cuerpo. Pero también no se pasan por alto los costos de ese constante contacto con el mundo, a pesar de ser una artista abierta con su público, y lo difícil que se lidiar con el asedio de los paparazzis y las selfies con sus seguidores. Es agotador, al final del día, ser Lady Gaga.
Estar consciente de esto no la detiene y no lo ha hecho en mucho. Lady Gaga se para y sigue: va al estudio de grabación para terminar su quinto disco junto al productor Mark Ronson, acaba de cerrar el protagónico de una película que dirigirá Bradley Cooper, está terminando de rodar la sexta temporada de American Horror Story, por la que ganó un Golden Globe en su quinta entrega, juntándose con productores para coordinar el show del Superbowl y, además, planear una gira de difusión de su última placa.
Siempre con un blunt o un cigarro en la mano, Lady Gaga no deja que nada la tire al piso, ni siquiera que su disco haya sido filtrado en Internet mientras está en un procedimiento médico serio, todo al mismo tiempo que la maquillan para una sesión de fotos, porque el show debe continuar. ¿Qué hicimos los mortales para merecerte, Gaga?
Gaga: Five Foot Two, que está disponible en Netflix desde el 22 de septiembre, es un retrato honesto de una artista, mujer e icono feminista y LGBTIQ+, que lo ha dado todo por su carrera y su familia, y así lo demuestra con su último disco Joanne, en honor a su tía muerta a los 19 años por Lupus y que hace en honor a su padre y su abuela, y que no tiene miedo de mostrarse como es, con o sin maquillaje, con vestidos raros o bajando desde el techo de un estadio en Texas.