Neil Armstrong se convirtió en un modelo a seguir para millones de niños que vieron o escucharon sobre el primer -y único- alunizaje en la historia de la humanidad. Sin embargo, y según un estudio realizado por Harris Poll para celebrar los 50 años de la proeza de Armstrong y su equipo, demostraron que las cosas han cambiado, y mucho.
Los héroes para los niños en Estados Unidos y el Reino Unido ya no son capaces de ir hasta el espacio exterior, ni tampoco atletas: estos quieren seguir los pasos de sus celebridades favoritas en la plataforma de videos más grande del mundo.
La investigación -que tomó en cuenta la opinión de 3 mil niños de entre 8 y 12 años- demostró que gran parte de los niños en Estados Unidos prefiere ser youtuber antes que cualquier otra opción (de hecho, la minoría eligió la opción de ser astronauta).
Mientras, un 56% de los niños en China se inclinó por la opción de conocer el espacio exterior. El segundo puesto fue para ser profesores, luego músicos, seguido por atletas y con tan sólo un 10% en el último lugar, consideraron la opción de ser youtubers.
Atrás quedaron los días cuando pensábamos que Youtube servía para ver la caída de Edger o algún video de Evanescence durante nuestra época dark. Ahora, y según las conclusiones del experimento, la generación Z ve como una posibilidad lucrativa dedicarse al universo online desafiando los paradigmas sobre lo que es tener una carrera.
En China la situación es particular porque muchas veces Youtube ha sufrido censura y gran parte de las redes sociales que funcionan en el gigante asiático, son diferentes a las occidentales. Además, es común que la restricción a internet no promueva a que los jóvenes vean la opción de ser vloggers como una rentable, eligiendo la opción de conocer el espacio frente a la publicidad que genera el gobierno respecto a estas actividades.