Al momento que se aprestaba para viajar a España, la Policía de Investigaciones detuvo al cantante Pablo Chill-E.
Según publicó la cuenta de Twitter de La Cuarta, Chill-E tenía una orden de detención pendiente por el delito de violación de morada.
“El sujeto mantenía una orden por el delito de violación de morada, luego de que ingresara a una vivienda en calidad de abandono. Al presentarse en el Aeropuerto Internacional, no había sido notificado de la denuncia”, contó Harry Cerda, subprefecto jefe de la Deinsa (Departamento de Inspección Secundaria Aeropuerto).
El cantante pasaría a control de detención el día de mañana durante el primer bloque.
Hablamos con Claudio Caro, manager del cantante, quien nos explicó que todo se trató de “una tontería, casi un malentendido”.
Según nos relató en exclusiva todo se remonta a noviembre del 2019 cuando Pablo Chill-E visitaba Pichilemu.
Durante la noche, pasó junto a unos amigos por fuera de una casa en cuyo patio había un barquito que Pablo y sus amigos encontraron sería una excelente foto.
Entraron al patio y se tomaron la foto pero al mismo tiempo unos vecinos vieron la escena y llamaron a carabineros, los cuales llegaron y detuvieron al cantante y sus amigos.
Según relata el manager la detención fue en buenos términos y que incluso los policías reconocieron al artista. Al rato fue liberado pero citado a una audiencia.
Ahí radicó el problema. Pablo no asistió a la primera audiencia y luego según asegura su manager, las otras citaciones nunca les llegaron. “De otra forma, si hubiésemos sabido jamás hubiésemos intentado viajar antes de resolverlo” explica Caro.
Así fue como este lunes cuando estaba por tomar un avión a España a grabar un video con Yung Beef el cantante fue detenido por la PDI.
Ahora estaría en Pichilemu a la espera del control de detención y debería estar libre en la mañana.
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