Aunque se agradece la honestidad del Presidente lo cierto es que los usuarios pagarán unos mil millones de dólares por un cambio de equipos que uno pensaría que debieran asumir las compañías que ofrecen luz.

Fin del misterio. El cambio en los medidores de luz, tema que ha levantado harta polémica entrado marzo, será pagado por tí, por mí, tu mamá y la mía.

Consultado hoy respecto de los costos que implicaría para los usuarios la renovación de los aparatos por unos “inteligentes”, el Presidente optó por no enredarse con intentar una salida más política y soltó la verdad: “Digamos las cosas como son, el usuario paga todo”, dijo, en probablemente la cuña más honesta y directa que se la escuchado en harto tiempo al mundo político. Ese todo, para ser precisos, corresponde a unos mil millones de dólares que los clientes deberán pagarle a las empresas de luz para que hagan una renovación de sus equipos, una medida pocas veces vista y que provocó bastante malestar entre la ciudadanía.

Sebastián Piñera justificó la medida diciendo que “en función del costo de una empresa modelo, eficiente, se calcula la tarifa al usuario. Y por tanto, el usuario paga todo, pero de una empresa eficiente. Si hay una empresa ineficiente que empieza a tirar la plata, eso no lo paga usuario; y por tanto el medidor entra dentro de esto”.

También dijo que los medidores que se usan actualmente son del siglo pasado y serán reemplazados por unos del S. XXI y que habría varios ahorros involucrados, como los que actualmente se pagan por el arriendo del aparato (500 pesos mensuales) y que no tienen necesidad de ser monitoreados personalmente porque se les puede controlar vía control remoto.

El proceso de cambios de equipos se está implementando en todo el país desde el año pasado y demorará todavía alrededor de siete años en llevarse a cabo completamente.

La diputada Pamela Jiles publicó en su cuenta de Twitter la lista de parlamentarios que habían

En una noticia no relacionada al hecho mismo pero que sí provoca un tanto más de esa sensación amarga de duda de “nos están cagando?”, hoy se dio a conocer el nuevo ranking Forbes de las personas más millonarias del planeta y nuestro presidente pasó del puesto 859 al 804, por lo que dudo mucho que le afecte demasiado tener que pagar por su nuevo medidor inteligente.

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