¿Una mierda o simplemente las reglas del arte callejero?

Es completamente imposible, o en realidad, para ser menos exagerado, muy difícil que si alguna vez pasaste por Nueva Providencia, entre Ricardo Lyon y Pedro de Valdivia, no hayas visto este trabajo.

Pero bueno si nunca lo viste, esa frase en pasado se transforma ahora en presente y futuro pues si no lo viste antes ya nunca lo verás. Porque ya no existe. Era. El domingo en la noche el clásico mural fue reemplazado por esto:

“Una pena 💔, nada dura para siempre. Esperemos que lo nuevo esté a la altura aunque difícil. Se cierran ciclos, se abren otros. Muchas gracias a la gente que siempre apreció este trabajo a medias que reflejó el sueño y motivación de sus creadores de querer marcar la diferencia, a puro pulso y corazón por casi dos años haciendo análogamente punto por punto, trazo por trazo. Siempre estará en los corazones de la gente que pasaba a diario y de la que aportó directa o indirectamente en este gran proyecto. Por motivos internos nunca pudimos seguir trabajando en esto pero siempre estuvo la intención. Quizás algún día cuando se vuelvan a alinear los astros aparezca otra obra magna de vagabundo, para demostrarle una vez más a las personas que querer es poder, que a base de dedicación y autogestión se pueden lograr ciertas cosas. Hasta siempre 100 caras & 1 país 🎈

PD: esta foto nos llegó por RRSS, ni idea de quiénes son los (i)responsables de esto”.

Con ese post , Vagabundo Boutique, la dupla de ilustradores detrás del mural se despidió de un trabajo que les tomó más de dos años.

La publicación desató un intenso debate. Aunque la gran mayoría de los comentarios son de apoyo a los ilustradores, de pena y de rabia por la pérdida de una pieza de arte super querida, también hay algunos comentarios que argumentan que el mural nunca se terminó y apelan a una ley no escrita pero conocida dentro de los cultores del arte callejero y que dice que si un trabajo lleva mucho tiempo inconcluso puede ser reemplazado por otro.

Ante esa opinión, los Vagabundo respondieron también a través de su fanpage:

Qué triste esa gente que dice: pero nunca lo terminaron, como si eso justificara borrarlo habiendo tantos lugares en la ciudad más grande de Chile para hacer un mural, esto claramente es signo de vandalismo y no entienden la diferencia entre un mural pintado con spray o pintura , que hacer un sombreado con puntillismo a mano a una escala gigante. Esto era ilustración aplicada al muralismo… pero bueh.. por eso trabajos así casi no se ven, por que son pocos los que entienden la diferencia. Igual Gracias por el apoyo.

Desde acá, y sin todavía conocer la totalidad de los detalles del caso, podemos adelantar que lo sucedido nos parece una mierda y que el sentido común indica que si vas a pintar encima del trabajo de otro tienes que hacer algo que sea indudablemente mejor o asumir que estás sencillamente incurriendo en un acto vandálico.

Mientras contactamos con las partes involucradas te dejamos abierto el debate: ¿Es simplemente una carajada lo que hicieron los autores del graffiti? ¿Es válido lo que pasó porque el mural anterior nunca se terminó?

Noticia en desarrollo…

Crédito foto portada: Ricardo Andrés