¿Son los amigos la nueva manera de encontrarse con uno mismo? ¿Habrá que dejar de estar en pareja y empezar a disfrutar la soledad? Quizá sólo debas ser soltero, solo y feliz.
La construcción de las parejas en la posmodernidad, en al era digital, es muy distinta a 20 o 40 años atrás. Los modelos relacionales son distintos como también nos vinculamos con el mundo de manera distinta, tiene ciertas particularidades que nos hacen cuestionar el ser pareja hoy en día.
En Chile, 41% de las personas busca un departamento para vivir solo, la gente sale a almorzar sola, van al cine solos, y disfrutan una tarde solos por el parque. Se ha escrito mucho sobre el amor moderno, pero este es el mejor tiempo para ser soltero.
Bella DePaulo, es una profesora de psicología de la University of California, tiene un PhD en Cs Sociales y es escritora. Con más de 60 años, se presume a si misma como una soltera de toda la vida, incluso “más soltera que ayer”. Es la autora de Living Single, un libro sobre cómo es vivir soltero y por qué todos deberíamos al menos, pensar esto como una opción.
DePaulo también ha investigado exhaustivamente la soltería, publicando más de 800 investigaciones al respecto en revistas de comunicación social. Dice que la felicidad conyugal es sólo un mito, y que sólo siendo soltero la gente podría “vivir mejor y tener una existencia más auténtica y más llena”.
“Uno de los estudios de gente que llevaba soltera toda la vida demostró que la autosuficiencia les es provechosa: cuando más autosuficiencia, menos probabilidades tenían de experimentar emociones negativas. En las personas casadas pasaba todo lo contrario”, dice DePaulo.
En conversación con POUSTA, DePaulo respondió que es un mito que las personas solteras están solas. “Las personas solteras están de muchas maneras más conectadas con otras personas que las que están casadas”.
¿Quiénes son los solteros?
Según un estudio de Match, la mayor cantidad de solteros están entre los 50 y 59 años en latinoamérica, con un 29% las personas entre 40 y 49 años y el 11% lo ocupan los de 30 a 39 años.
32% de esta muestra tienen al menos un título universitario, el 20% no logró completar la universidad, el 10% tiene una carrera técnica y el 8% cuenta con una maestría, el 2% se ha titulado con un doctorado y el 1% terminó su postdoctorado.
¿Qué es ser soltero?
Tal como comenta Cristina Valdés San Martín, psicóloga clínica, terapeuta de parejas y fundadora de Fruta Húmeda, proyecto que promueve el bienestar, educación y placer sexual de las personas, “La soltería se relaciona con un estado civil, con algo relacionado con la legalidad”.
La psicóloga Claudia Contreras Soto también está de acuerdo con esta definición y agrega “Estar soltero no sólo se refiere al estado civil, sino a sentir que no tienes un compromiso sentimental lo suficientemente serio con otra persona. Puedes tener un romance con alguien, y aún así sentirte soltero. Los jóvenes, por ejemplo, suelen hacer la diferencia entre ‘andar’ y ‘pololear’ donde pololear implica un mayor grado de compromiso. De acuerdo a esto, puedes estar soltero, pero no solo, especialmente si vemos la soledad en el contexto más amplio de las relaciones. Tal vez no tengas pareja, pero quizás tienes muchos amigos y familiares y te sientes bien con eso”.
Sologamia
Ser un soltero es una opción válida, como cualquiera de las demás que existen en la vida. Son decisiones premeditadas que se piensan, se cuestionan y como cualquier otra tiene que ver con la manera en la que cada persona elige vivir su vida.
Sophie Tanner decidió casarse con ella misma como acto de revolución y también de amor propio.
Esto es un parámetro constante cuando se piensa en estar soltero, se asocia de inmediato a la soledad. La soledad está relacionada con algo emocional, espiritual e incluso se asocia con este vacío existencial que “puede ocurrir en una época en la que puedes creer en nada y creer en todo y sentirte parte de todo y de la nada”, continúa Valdés.
“También puedes estar dentro de una multitud y sentirte súper solo así como también estar en pareja y sentirte solo y al final no tiene que ver con cuántas personas te relacionas sino que como tú te vinculas con esas personas, o con el mundo, si tienes la capacidad de vincularte, de conectarte con un otro o con unos otros y así poder ir trabajando tu emocionalidad”.
“Estar soltero es no estar en ninguna relación amorosa que signifique algún tipo de compromiso pre-establecido, y la relación que tiene con la soledad es que generalmente se confunde porque se cree que estar soltero es sinónimo de estar solo. Siempre existen distintos tipos de compañía que pueden llenar ese vacío que se nos ha enseñado a través del amor romántico constantemente: que es que estamos vacíos al no tener una pareja”, dice Magdalena Fabbri, psicóloga.
“La soledad se suele entender como un aspecto negativo, incluso la gente suele sentir pena por las personas que no están en pareja porque creen que eso es estar solo o no tener a nadie”.
“Me parece bien que la producción cultural hable de esto, porque hay mucho miedo a estar solo. Venimos de una cultura donde si cumples una cierta edad empiezas a temerle y es súper terrible, porque no es tan malo estar solo y disfrutar de la soledad. Se han idealizado las relaciones humanas y el amor en torno a la pareja estable y la convivencia, al amor por siempre”, contó la ilustradora de Diario de un Solo, Catalina Bu.
La soledad se suele entender como un aspecto negativo, incluso la gente suele sentir pena por las personas que no están en pareja porque creen que eso es estar solo o no tener a nadie. La psicóloga José Cabrera cree que estos dos términos no tienen en absoluto una conexión real, sino que hay un imaginario construido en relación a las expectativas que se mantienen de otras generaciones.
“La soltería y la soledad no tienen una conexión real, sino más bien una impuesta a partir como se entiende el ideal para la sociedad. El estar con alguien no tiene que ver con estar más acompañado, existen muchas relaciones que son tóxicas y no facilitan que las personas crezcan. Además, se suele mal entender la soledad, esta muy demonizada, se concibe que para estar feliz hay que estar rodeada de gente, sin contar que siempre es necesario tiempo para una misma, para quererse, para conocerse. La soledad no es mala per se, es necesaria en su justa medida y hay que valorarla”.
“Puede que tu soltería sea parte también de una decisión tuya y que la vivas como parte del autoconocimiento o que no estás preparado para vincularte con otra persona”.
Valdés cree que a veces ha una relación, ya que las personas están completamente libres de sentirse solas si están solteras, pero esto no es una conexión obligatorio ni directa. “Puede que tu soltería sea parte también de una decisión tuya y que la vivas como parte del autoconocimiento o que no estás preparado para vincularte con otra persona, etc.”.
El amor se puede entender como una fuerza trascendental, transformadora, una energía potente, y que se construye también dentro de un paradigma y este paradigma es el que más conocemos es el amor romántico, pero hay otros tipo de paradigmas de cómo entender el amor.
“En estos paradigmas hay ciertas creencias, hay ciertos mitos, hay cierta expectativa, hay ciertos ideales, o estereotipos que dicen cómo se vive o cómo se debe sentir el amor, en realidad eso es una búsqueda interior que tiene que ver tanto como la comprensión de ti mismo como del otro”, continúa Valdés.
¿Por qué creen que las personas ya no quieran vivir el resto de sus vidas en pareja y prefieran el amor no romántico de los amigos?
Contreras: Veo el “casarse para toda la vida” como algo religioso, cultural. Cada vez es más aceptado socialmente el no tener pareja, no casarse o divorciarse. Por lo tanto, hay menos miedo al qué dirán, y la gente se atreve cada vez más a tomar este tipo de decisiones con tal de ser feliz. Las normas sociales cambian con el tiempo. En este punto, se me viene a la mente el psicólogo Rafael Santandreu que recomienda cambiar de pareja cada cinco años para ser feliz.
Cabrera: El amor romántico es un veneno que se ha propaga sin parar, genera dolor y una serie de complejos, facilita la violencia y el conformismo.
Ahora las personas se han dado cuenta más de las desventajas de creer los mitos del amor romántico, se han dado cuenta que “el amor del bueno” no existe, siempre debería ser bueno. Frente a la dificultad de entablar relaciones sin celos, sin enjuiciamientos es más fácil y real generar lazos de compañerismo con amigas, amigos, amigues. No como una pareja que se idealiza, sino como pares, compañeros de apoyo y vida.
Fabbri: No creo que sean los amigos las nuevas maneras de vivir el futuro, pero sí son una parte importante de lo que sería el crecimiento personal y el avance de la gente hacia su propia autonomía, reconocer que las redes también son partes de otro tipo de amor, esas redes de amistad son otro tipo de amor o incluso en muchos casos mucha gente mezcla esas ideas de la amistad y el amor, porque también conocemos a mucha gente que tiene relaciones con la amistad, el amor, el sexo y caricias y ternura, pero a pesar de eso no existe ningún vinculo ni proyección necesaria en el futuro, sino que solamente aceptación, amor que son los valores que guían principalmente la amistad, mientras que las relaciones de pareja se llevan siempre desde un sadismo que es el deber ser, pero con los amigos puedes respetar que viven en un espacio distinto, que existen otros contextos, que además no existe este compromiso que se ha enseñado a nivel social como tener una pareja monógama que te deba fidelidad.
¿Cómo ves en esta generación la soltería?
DePaulo: Más que antes la gente está eligiendo la vida y los arreglos que funcionan mejor para ellos. Se solía pensar que todos tenían que seguir la misma vida que su ascendencia: casarse, vivir con su cónyuge, tener hijos, tener nietos, y seguir casadas.
La gente ya no es la misma. Por ejemplo, algunas personas encuentran que sus vidas son mejores y tienen más significado si viven solteros. Si viven solteros puedes decidir si compartir su casa con más gente, que podrían ser como familia para ellos. Quizá también quieran vivir solos y seguir manteniendo relaciones con las personas que les importan, como sus amigos y familiares. Otra gente quiere vivir en un lugar propio, pero en un vecindario donde la gente es amigable y se preocupa de los demás.
Contreras: Veo que la soltería es una opción cada vez más válida, porque estamos ante un gran cambio sociocultural. Es como si nos estuviésemos reinventando respecto a las relaciones afectivas y sexuales y se nos abriera la mente para aceptar las distintas opciones de vida.
Hoy ya no sólo salen del clóset los gays, lesbianas, bisexuales y transgénero; sino que también lo hacen quienes optan por la sologamia, la ambigamia y el poliamor, o incluso quienes se declaran “asexuados”.
Cabrera: La veo como una oportunidad, nuestra generación radica mucho en la imagen, las redes sociales nos han impuesto cánones irreales de felicidad, entonces la soltería conlleva una vida desenfrenada de sexo y descontrol, en sí tener una sexualidad plena y explorar no tiene nada malo, pero cuando esta es forzada por tu imagen, se generan problemas. La soltería no debería ser un estado de permanente competencia con la otra, donde se busca aprobación social a partir de lo que los otros digan.
Fabbri: En esta generación la soltería se ve como un espacio de conocimiento personal, hace 20 años la gente no conocía bien a sus parejas y se casaban súper rápido. Existían relaciones largas, pero actualmente la gente está con hambre de poder conocer cómo son realmente las relaciones entre dos personas que son consensuadas, que existen dentro de un contexto social que es diferente, donde los amigos juegan un rol importante porque no dependes de lo que diga tu pareja, la soltería es un espacio de autodescubrimiento, de rebeldía.
¿En qué momento histórico redefinimos la familia, la soltería y las relaciones amorosas en las que nos encontramos hoy?
DePaulo: Creo que estamos en un momento muy importante. Más personas que nunca están solteras. En los EE. UU., Incluso si cuenta a las personas que se casan, las personas aún pasan más años de su vida adulta no casadas que casadas. Otra tendencia es que más personas no tienen hijos. Y para aquellos que están teniendo hijos, están teniendo menos de lo que solían: el tamaño de la familia está disminuyendo.
Eso significa que muchos adultos no tienen un cónyuge y no tienen hijos. Tal vez tienen hermanos, pero no tantos como solían hacerlo, o ninguno. E incluso las personas que tienen hijos o familiares pueden descubrir que esas personas viven lejos de ellos, por lo que no se puede contar con ellos para obtener ayuda en la vida cotidiana.
Debido a todas esas tendencias, el lugar de los amigos en nuestras vidas se está volviendo mucho más importante. Las personas más a menudo eligen a las personas que les importan. Crean sus propias familias. Esas familias elegidas podrían incluir parientes, pero probablemente también incluyan amigos.
¿Por qué las personas prefieren ser solteras? ¿Por qué la gente prefiere estar en una relación? ¿Qué consejo le darías a ambos?
DePaulo: Hay muchas razones por las cuales las personas aman vivir solteras. A ellos les puede gustar prestarle atención a todas las personas que les importan, y no solo a una persona (un cónyuge).
Tal vez les guste su autonomía: sus oportunidades para tomar sus propias decisiones y seguir el tipo de vida que consideran más significativo. A las personas solteras les gusta perseguir lo que les importa.
En promedio, les importa más el trabajo que es significativo. (A las personas casadas les importa más cuánto se les paga y si hay oportunidades para obtener un ascenso).
Muchas personas solteras adoran tener tiempo para sí mismos y un lugar o espacio propio. Para ellos, la soledad no da miedo. No se preocupan por sentirse solos. En cambio, saborean la oportunidad de ser reflexivos, relajados, creativos y tal vez más espirituales.
Por supuesto, no todas las personas solteras quieren permanecer solteras. Pero si estás soltero por elección o porque es donde las circunstancias de la vida te han guiado, mi consejo es este: ¡Vive tu vida individual completa, alegre y sin disculpas!
Solteros, solos y felices
Daniel Sánchez es un psicólogo especialista en relaciones de pareja y para ser un soltero feliz recomienda encarecidamente:
- No pensar tanto en cómo sería la vida en pareja.
- Date gustos, haz lo que quieras hacer.
- Haz planes y olvida las excusas.
- Mírate con alegría y llénate de amor propio.
- No niegues tu soltería. Acéptala.