Tras el ataque armado que un joven de 18 años protagonizó el fin de semana en el estado de Nueva York, el cual terminó con diez personas asesinadas y otras heridas, las investigaciones revelaron que el agresor estaba vinculado con ideas racistas y xenófobas, las mismas que han motivado otros atentados en el país norteamericano.
El pasado sábado, un hombre blanco de 18 años ingresó a un supermercado del sector este de la ciudad de Búfalo, estado de Nueva York, Estados Unidos, para efectuar un ataque armado en el que asesinó a diez personas con un rifle semiautomático, en una zona en donde según aseguró The New York Times, hay una alta concentración de población negra.
Tras las masacre, la policía estadounidense realizó una investigación en la que confirmaron que el sujeto, antes de partir hacia la tienda en cuestión, publicó un discurso en internet en el que manifestó que el lugar al que se dirigía era un punto de encuentro para individuos de diferentes culturas, quienes en palabras del agresor, tenían el objetivo de “reemplazar étnicamente a mi propia gente”.
Junto con ello, un reportaje de la BBC confirmó más tarde a través de datos oficiales que de las trece personas que fueron baleadas en esa instancia, once eran negras.
Esto llevó a que diversos analistas alrededor del mundo catalogaran sus escritos y el atentado de Búfalo dentro de las consecuencias de un fenómeno conocido como “la teoría del reemplazo”.
Según el periódico de La Gran Manzana, esta puede definirse a grandes rasgos como una creencia social en la que distintos sujetos o grupos tienen la convicción de que existen facciones de la élite occidental que planean disminuir o eliminar la preponderancia de estadounidenses blancos en el país norteamericano.
En una entrevista con BBC, la experta de la organización analítica Politikon, Berta Barbet, explicó que “es una reacción de los blancos que sienten que el mundo está cambiando en una dirección que no les beneficia”.
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En este sentido, la analista añadió que creen que “a medida que el mundo progresa, van perdiendo status y toman conciencia de que hay personas que están por encima de ellos y otras por debajo”, un escenario en el que, según los adherentes a la teoría del reemplazo, ellos deberían estar en la cima, por sobre el resto.
Tanto el caso de sábado, como un tiroteo de Pittsburgh en 2018, cuando un hombre armado entró en una sinagoga para dispararle a once judíos, ya que según el agresor permitían la llegada de “invasores” de otros países, aplican como instancias en donde los protagonistas son vinculados con las creencias racistas y supremacistas de las ideas en cuestión.
A esto se le suma cuando, en 2019, un hombre asesinó a 23 personas en un supermercado de El Paso, Texas, bajo el discurso de odio de que ocurría una “invasión hispana” en dicho estado del sur.
Si bien, una investigación del medio británico informó que la teoría del reemplazo como tal empezó a atraer adherentes cuando el escritor francés Renaud Camus publicó estas ideas en un manifiesto en 2010, el racismo y la xenofobia siguen figurando como una de las principales causas que motivan a agresores a efectuar sus ataques en Estados Unidos, país que aún mantiene políticas permisivas para la compra y porte de armas en varios de sus estados.