American Analog Set ha sido una de esas bandas, lamentablemente muy infravaloradas, que a pesar de haber sacado discos increíbles como “The Golden Band” o “Know By Heart” parecen no llegar a una audiencia considerable.

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Pero para aquellos que han disfrutado hace tiempo de sus discos, y de su sonido tan característico puede sorprender el hecho de que no hayan publicado nada hace más de 4 años. Lo cierto es que los chicos de AmAnSet, aún sin haber oficializado su disolución, se han tomado un gran descanso desde el que vendría ser su último disco de estudio “Set Free” del 2005, por lo que este 2009 sólo hemos tenido noticias de la banda vía lanzamiento de un disco de rarezas, denominado “Hard to find: Singles and Unreleased from 2000-2005”,  que ofrece ni más ni menos que diferentes versiones de canciones como la que da título al compilado, además de temas versionados por Matt Pond Pa y apariciones del infaltable Ben Gibbard; muy similar a los otros discos de rarezas que la banda ya ha acostumbrado a  sacar a lo largo de su carrera.

Pero ahora bien, los miembros de AmAnSet no han estado “descansando” claramente, mientrás algunos se dedican a proyectos audivisuales (Sean Ripple), otros como el líder de la banda han estado formando parte de nuevos  proyectos musicales.

Tal es el caso de  The Wooden Birds, el cual resulta de la colaboración de David Wingo (Ola Podrida), Chris Michaels, Sean Haskins en la batería, junto con las voces de Kenny y Leslie Sisson (quien en los tiempos antiguos de AmAnSet colaborara con las voces en algunos temas).

El primer disco homónimo de la banda “Magnolia” fue lanzado a comienzos de año por Barsuk/MorrMusic, y consta de 12 canciones muy al estilo AmanSet, pero notoriamente diferentes, que logran conmover y recordar mucho al “Home V” EP (colaboración entre Andrew Kenny y Ben Gibbard) por lo que no es casualidad encontrar temas como “Hometown Fantasy” formando parte del disco, ya que canciones como éstas se acomodan mucho mejor a este nuevo proyecto que lo que Kenny solía hacer en la banda dorada.

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Magnolia es un disco que cautiva y emociona, mucho más folk y rústico que lo que Kenny acostumbraba a hacer en AmAnSet, pero aún así fragil, que se aleja por completo del uso de metalófonos, vibráfonos y melodías ensoñadoras, para resaltar por sobre todo la voz evocativa y delicada de Kenny junto a la de su nueva colaboradora. Los temas más rescatables podríamos decir que son “Bad”, “Sugar”,  “False Alarm” y “Seven Seventeen”. Un disco precioso, de principio a fin, especial para estos días de invierno en donde no viene mal escuchar una dulce melodía en las mañanas.