Verónica Undurraga fue pieza clave en la despenalización del aborto en tres causales. La abogada con doctorado en Columbia es experta en la materia y en todos los temas relacionados a las desigualdades de género. Lleva hablando de la paridad en los órganos constituyentes desde mucho antes que fuera tema. Verónica utiliza su expertiz en aportar a construir un lugar más justo.

¿Qué relevancia adquiere la conmemoración del 8M en el contexto del estallido social?

Las causas del estallido social tienen que ver con la disconformidad de gran parte de la ciudadanía con distintos tipos de injusticias, entre ellas la desigualdad de género. No puede haber un sistema político, económico o social justo sin justicia de género, es decir, manteniendo la mayoría de los recursos materiales y simbólicos (estatus, poder, prestigio) en manos de los hombres.

Las mujeres, por diversas que seamos, tenemos necesariamente una experiencia distinta a la de los hombres, precisamente porque en una sociedad en que la desigualdad de género es estructural, hemos ocupado otros lugares y roles que los hombres y recibido otro trato.

El mundo mirado desde la experiencia de las mujeres es la mitad del mundo y esa mirada debe estar presente en la construcción de la nueva constitución y las nuevas políticas sociales, precisamente para romper o cambiar estructuras injustas y no repetirlas.

No pueden proponerse ideas sobre reformas de salud, pensiones o seguridad sin pensar cómo es la experiencia de las mujeres con el sistema de salud, con sus jubilaciones, con la violencia.  

¿A qué mujeres destacarías por su rol en el movimiento social?

Yo destacaría el trabajo conjunto que hicieron las parlamentarias, la red de politólogas y organizaciones de mujeres para lograr aprobar el proyecto de paridad. Ese es un ejemplo extraordinario de un trabajo políticamente transversal, profundamente progresista y que demostró una capacidad de trabajo técnico, de negociación política y comunicacional extraordinaria.

Si todos los proyectos se trabajan con ese nivel de inteligencia, habilidad y compromiso generoso, podríamos ser muy optimistas en el futuro. Es un gran ejemplo para todos y todas.