No sé bien en qué minuto de mi vida me convertí en esa clase de persona que corriendo una vuelta a la manzana siente que está a punto de morir, pero es real, y me pasa.
Quizás es porque llevo cerca de tres años sin correr religiosamente, pero desde que supe de Wings for Life, me obligué a mi mismo a volver a hacerlo.
Una lesión reciente en mis rodillas me hizo valorar enormemente el privilegio de tener dos piernas totalmente funcionales. Así es como conocí Wings For Life, una carrera creada para financiar a la fundación sin fines de lucro del mismo nombre dedicada a la investigación de las lesiones medulares de todo el mundo.
Otra parte divertida de esta corrida, es que es la primera y única en la que la meta te persigue, ya que treinta minutos después de la largada de los participantes, el catcher car comenzará a perseguirlos. A medida que el auto va alcanzando a los participantes estos son eliminados. Si, muy al estilo Hunger Games.
La cuarta versión de Wings for Life Run será el domingo 7 de mayo a las partir de las 8:00 horas. Partirá desde el Parque O’higgings, luego Beaucheff, Club Hípico, Avenida el Mirador, Abate Molina para finalmente llevarnos por calle Exposición hasta la carretera que lleva a Melipilla.
Las inscripciones ya están abiertas. Ahora solo nos queda prepararnos.
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