Que sea una “semana santa” no significa que nos tengamos que comportar como santos.
Por esta vez vamos a dejar el preámbulo a un lado. Vamos al tiro con nuestra selección de posiciones para vivir una experiencia religiosa.
La Santísima Trinidad
Agrégale al placentero sentimiento de sentirte llena el sentir que tu pareja introduzca algo en la puerta trasera también. Intenta con un dedo en ese lugar, un juguete curvo (bien lubricado) en la vagina y anda por la trifásica jugando con los dedos en tu clítoris. Te aseguro que se sentirá extraordinario, así como que todo está siendo atendido tal como tiene que ser.
Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa
Haz que el beneficiado se siente en una silla cómoda o un sillón. Empieza a subir mientras besas suavemente sus muslos para finalmente llegar al cirio. Siéntete libre de juguetear contigo por mientras, o puedes esperar que él/ella haya sido también un@ pecador@ y te devuelva el favor.
El acólito constipado
Cuando él se haya puesto en posición de cangrejo caminante, párate sobre él y permítele entrar. Después apóyate en tus manos para estar en la misma posición que él, y con él adentro tuyo. Puede ser chistoso verse sin ropa y en esa posición, pero les aseguro que se les olvidará cuando comience la acción.
La crema del pecado
Restringe tus brazos y deja que te alimente en las partes sensibles (y a eso me refiero a los pezones). Deja que te lengüetee lo que te queda en el cuerpo y experimenta con la temperatura del cielo y del infierno mientras disfrutas en el purgatorio. Continúa con la sesión de sexo y probablemente terminará siendo un misionero muy pegajoso.
Los gif son obra de @buguwa