Mientras nuestra prensa pasa por acusaciones de colusión informativa tras confirmarse la reunión de altos ejecutivos de la televisión con entidades gubernamentales (entre ellos el mismo Sebastián Piñera y Andrés Chadwick), la prensa internacional sirve como un filtro para enterarnos con propiedad de lo que ocurre realmente tras tres semanas de levantamiento social.
Anoche el Presidente Sebastián Piñera dio una entrevista a la BBC en la que niega que Chile sea el país más desigual de América Latina, realizó un mea culpa por no saber escuchar a tiempo las demandas sociales pese a que ya tuvo experiencia con levantamientos durante su primer gobierno, y en la parte más polémica, defiende el uso de toque de queda y responde que también ha sido parte de las movilizaciones cuando los periodistas a cargo lo increparon por el uso desmedido de la fuerza.
En la entrevista, el mandatario tampoco responde al problema de fondo que ocurre en el país: el sistema neoliberal que genera una desigualdad tremenda. La misma BBC aseguró, que el poder adquisitivo de un chileno promedio es igual al de Paraguay mientras que los precios en Chile de los servicios públicos, son tan caros como en España. A continuación, un extracto de lo más importante que dijo Sebastián Piñera respecto a la crisis, en la cual se abre a la posibilidad de una reforma a la Constitución.
Sin embargo las dos cosas que más llamaron la atención son las audaces declaraciones del presidente cuando defendiendo el estado de emergencia dijo:
“Luché contra todo tipo de dictadura o gobierno dictatorial. Luché por recuperar nuestra democracia hace 30 años. Estaba en esa línea y para mí esos tiempos nunca serán olvidados, así que tengo en mente esos pensamientos. Es por eso que cuando decidí decretar el estado de emergencia tomé todas las precauciones necesarias para proteger los derechos humanos”.
O cuando le preguntaron sobre el actuar desproporcionado de carabineros en las marchas, la periodista le dice que lo ha visto, que ha estado allí:
“Yo también he estado allí. No confunda la acción de una persona, que tal vez cometió un error, de la instrucción que le hemos dado a nuestras fuerzas. Nuestras fuerzas policiales están totalmente comprometidas con el respeto de los derechos humanos y totalmente comprometidas con el uso racional y proporcional de las fuerzas”.
Autocríticas y soluciones parches al sistema
¿Qué autocrítica debe hacerse su gobierno y usted ante el estallido social?
Muchas autocríticas y las estamos haciendo. Por de pronto, nadie predijo o tuvo la sensibilidad para darse cuenta de esto. No escuchamos con suficiente atención, no entendimos con suficiente claridad el mensaje. Y esta no es una crítica solamente al gobierno, esto se viene acumulando hace décadas.
¿Y cuáles son, para usted, las grietas del sistema político y económico chileno que se vienen acumulando hace décadas y que llevaron al estallido social?
Creo que hay varias grietas. A pesar de que hemos reducido la desigualdad, Chile todavía es un país demasiado desigual. La gente tiene la percepción, y con mucha razón, de que en Chile hay demasiados abusos. De que hay muchas empresas que no respetan a sus clientes, a sus trabajadores y el medioambiente. Después de mucho tiempo de acumular, decidieron manifestarse con toda la fuerza que lo han hecho.
Violaciones a los Derechos Humanos
Hay un sentimiento de que las policías han utilizado un uso excesivo de las fuerzas en protestas pacíficas. Naciones Unidas se encuentra actualmente en el país.
Por supuesto, hay quejas sobre el uso excesivo de la fuerza y los derechos humanos. Si eso sucedió, puedo garantizar que será investigado y procesado por nuestro sistema tradicional. No habrá impunidad. Ni con las personas que prendieron fuego a los supermercados y a la mayoría de nuestras estaciones de metro, ni con aquellas que eventualmente cometieron un exceso de uso de la fuerza o el crimen. Así es como lo haremos en una sociedad democrática como la nuestra.
Ya no hay estado de emergencia, pero todavía hay una fuerte presencia policial en la protesta. Eso sí intimida a las personas y lo he visto donde las familias protestan pacíficamente.
Por supuesto, la fuerza policial actúa protegiendo el orden público, a veces cuando dentro de un grupo de personas hay algunos delincuentes que quieren incendiar más estaciones de metro, tienen que actuar y a veces tenemos inocentes heridos y lo lamento, lo lamento mucho.
En la calle se siente un uso de la fuerza desproporcionado…
Explicaré cómo debe funcionar las fuerzas policiales. En primer lugar, tienen que tratar de actuar solo con su presencia. Luego, deben intentar convencer a las personas cuando están cometiendo disturbios y luego, solo en casos extremos y de manera proporcional, pueden usar gases lacrimógenos o agua…
No hay negociación entonces, porque se ha ido directo al paso número tres...
No, ese no es el caso.
Hemos estado allí…
Yo también he estado allí. No confunda la acción de una persona, que tal vez cometió un error, de la instrucción que le hemos dado a nuestras fuerzas. Nuestras fuerzas policiales están totalmente comprometidas con el respeto de los derechos humanos y totalmente comprometidas con el uso racional y proporcional de las fuerzas.
Liderazgo
Como usted dice, hay un grupo pequeño que ha hecho actos violentistas. Pero la mayoría de los chilenos parece querer un cambio sustancial. Su aprobación es del 13%, ¿cree que la gente tiene fe en que usted será la persona que liderará este cambio?
Bueno, yo tengo fe. Porque mi deber como presidente, y prometí cumplir con ese deber, es mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos.
Hay gente que siempre dirá que lo que hacemos no es suficiente y que todo es cosmético. ¿Cómo puede ser cosmético? Estamos haciendo cosas que en Chile nunca antes habíamos hecho.
¿Cómo se sale de esta crisis? Se ha hablado de nueva constitución, de asamblea constituyente, ¿su gobierno está dispuesto a liderar un proceso de cambio?
Lo que quiero es lograr un acuerdo, escuchar a la ciudadanía con atención y humildad. Ponernos de acuerdo en el mundo de la política. A nosotros nos cuesta mucho impulsar la agenda legislativa en el parlamento porque tenemos minoría y nos bloquean muchos de los proyectos de ley, por ejemplo, la reforma a las pensiones. Necesitamos unidad, acuerdos, grandeza, responsabilidad.
Por supuesto, después de restaurar el orden público y poner en marcha la agenda social,no termina el debate y vendrá una segunda etapa en que estamos dispuestos a conversarlo todo, incluyendo una reforma a la constitución.
Este es un extracto con algunos los puntos que realizó Sebastián Piñera en entrevista con enviados especiales de la BBC. Para leer la conversación completa, pincha en este enlace.