Virginia Rodríguez recibió a tres inmigrantes haitianos que se encontraban imposibilitados de trabajar hasta demostrar que no tenían lepra. “La gente se basa en la memoria retrógada de la lepra”, nos dijo.

El 1 de agosto, Virginia Rodríguez recibió el llamado desesperado de un colega mientras atendía en su consulta del Hospital de Valdivia. Su compañero le indicó que se encontraba junto a tres inmigrantes haitianos en la sala de espera del recinto, angustiados por no poder comunicar la situación en la que se encontraban debido a la barrera lingüística existente entre el español y el creole. Hay que hacer una salvedad: Rodríguez también es migrante, proveniente de Argentina.

Virginia se dirigió hasta el lugar y con amabilidad, utilizó los pocos conocimientos de francés adquiridos durante su formación profesional para descubrir con tristeza que el grupo compuesto por dos hombres y una mujer estaban siendo discriminados por los casos de lepra diagnosticados esta semana en el país, teniendo lugar uno de ellos precisamente en Valdivia.

Como si fuera poco, Rodríguez vio que la chica del grupo traía consigo un papel donde aseguraba que no le querían dar trabajo hasta que se descartase su condición de portadora, situación que la profesional no tardó en viralizar en redes sociales y calificar al responsable como “inescrupuloso, xenofóbico e ignorante que discrimina una y otra vez al más indefenso”. La publicación fue compartida por nuestro fanpagegenerando más de 2 mil reacciones y cientos de comentarios de indignación ante la situación y que te contamos en profundidad aquí.

“Esta conducta es netamente producto de la ignorancia que existe hacia la enfermedad, principalmente por la forma en que es retratada en la Biblia, específicamente en el Levítico, donde los leprosos son segregados”, afirma la dermatóloga.

Gracias a la ayuda de Google Translate, la profesional pudo conocer en profundidad la situación de los afectados que no tenían más de 30 años y llegaron al país hace tan solo 5 meses. A Valdivia arribaron hace apenas unas semanas, convencidos de que la situación para encontrar empleo sería mejor que en la capital.

El tema de los casos de lepra en el país fueron muy mal manejados mediáticamente y contribuyen a que los estigmas respecto a la enfermedad generen situaciones xenófobas”, dijo la profesional que realizó sus estudios sobre este tipo de enfermedades en España y agregó que “en Argentina se diagnostican 300 casos de lepra al año y no es necesario segregar al existir un tratamiento efectivo, curativo y ambulatorio”.

Para que una enfermedad sea endémica, se requiere un caso por cada 10 mil habitantes. Los países donde esta enfermedad es endémica son Brasil, China, India, Sudán y otras naciones por citar algunas. Haití no es una de ellas.

La especialista también no explica que los principales síntomas de la lepra responden a lesiones cutáneas –presencia de alteraciones en la piel- , generalmente circulares y ovaladas que pueden ser de color rojo o café dependiendo de la tonalidad de la piel del afectado. Estas protuberancias son anestésicas, ya que las microbacterias de la lepra eliminan los nervios receptores del dolor.

Ninguno de los afectados por este caso de discriminación racial presentó síntoma alguno y se fueron del recinto con la seguridad de poder trabajar. Sin embargo, tanto los asistentes sociales del lugar y la gente que vio la situación ofrecieron su ayuda de inmediato, demostrado que la calidad humano todavía queda.

“La gente en Valdivia es hospitalaria y los párrocos ya están ayudando a la comunidad que viene llegando. Sin embargo, el sistema de salud público en Chile no da abasto, y el país debería acoger a sus inmigrantes, pero con garantías”, afirmó Rodríguez respecto a la llegada de 44 mil ciudadanos de Haití que llegaron a Chile tan solo esta primera mitad de 2017.

Si pudiera hablar con el tipo responsable de mandar a hacerse exámenes a los jóvenes tan solo por su nacionalidad, le diría que todos aportamos un granito de arena en el mundo, y si respetamos a otros podemos crecer en la diversidad de colores y de género,  finaliza.