Sebastián Piñera mete las patas hasta el fondo en caca con un violento “chiste” machista y dos de los principales rostros femeninos de la derecha salen a blindarlo. Horas después, de la misma trinchera llega una propaganda que asegura que “la educación gratuita y de calidad ya existe”. Ya paren.

Retrocedamos algunos años. Tuve que colarme a una reunión de adherentes de Evelyn Matthei durante las elecciones pasadas por motivos universitarios y lo que vi en el lugar reafirmó mi decisión de no votar nunca por la derecha por sentido común.

La reunión tuvo lugar en uno de los salones del hotel de una ciudad lejana y desconocida que se parece mucho a Springfield (Rancagua) y los agrónomos que desembolsan muchas lucas durante el Champion (campeonato de rodeo) se sobaban las manos a la hora de exponer sus argumentos resumidos en las siguientes frases:

“La educación nunca podrá ser manejada por la izquierda porque los comunistas tienen las ganas de robar en la sangre”

“Los homosexuales y las mujeres se ofenden por todo hoy en día y no respetan la forma de pensar y opiniones de otros”

“Piñera y Matthei no roban porque ya tienen lo suficiente como para querer robar más”

Chao universidad. Luego de una hora de escuchar vociferar a la gente sobre el comunismo como una especie de catarsis evangélica me fui, mientras mi mamá ondeaba la bandera de Piñera por entre la multitud que recibía a Matthei como la salvadora del Chile marxista-gay-bueno para el aborto.

Metí la cabeza en el suelo como un avestruz y me retiré feliz de no tener que escuchar más esos argumentos.

Pero me equivoqué.

De cara a las presidenciales actuales, casi cinco años después, nos encontramos con una derecha 2.0  que se siente con la libertad de opinar sin pensar a raja suelta. En un momento donde deberíamos escuchar propuestas, simplemente nos rodeamos de comentarios salidos de contexto lanzados a diestra y siniestra sin una mínima capacidad de reflexión.

Partamos por el chiste de Piñera: En primer lugar, la broma era fome, y de autoría de Checho Hirane, que ya lo dice más o menos todo. Del tipo de chiste que dicen los suegros en un asado y uno se tiene que reír como si no pudiésemos volver a hacerlo en la vida por complacencia. Dudo que alguna de las carcajadas de ese auditorio fuese sincera.

Por otro lado, cuando el candidato presidencial predilecto toma a la ligera la situación de las mujeres en Chile –que no pueden defenderse sin ser catalogadas de exageradas-  con un comentario ultra zorrón, da pie para que la población que concuerda con sus propuestas también lo haga con el trato que han recibido las mujeres y que tanto han intentado erradicar de un punto hasta ahora. Pero la guinda de la torta es cuando una mujer víctima directa del machismo se muestra a favor de una conducta semejante.  

Cecilia Pérez criticó duramente a Daniel AlcaínoYerko Puchento– cuando la trató de “monga” y después de ser poco agraciada. En esa oportunidad la ex vocera de gobierno señaló que se sintió “profundamente violentada” y amenazó a Canal 13 con realizar  millonarias acciones legales.

Sin embargo, y tras el chiste de Piñera, Pérez lo defendió desde Twitter:

Jaqueline Van Rysselberghe, a quien todos conocemos por ser de la derecha dura old school, también defendió la broma -aún  cuando el ex presidente se había disculpado –afirmando que “está en un contexto donde el fin no es la ofensa”.

Pero eso no es todo. La respuesta que buscábamos para tener  una educación gratuita y de calidad estuvo siempre frente a nuestras narices ¿Para qué condonar el crédito con Aval del Estado? ¿Para qué crear más universidades? Según Loreto Letelier, la candidata a diputada por la UDI, la educación gratuita ya existe, y está en internet. 

En un comunicado compartido en su cuenta de Facebook, Loreto Letelier nos invita a abrir los ojos y darnos cuenta de una buena vez que no existen barreras para el aprendizaje siempre y cuando exista conexión. La candidata se defendió luego del tremendo backlash que le hicieron por redes sociales aludiendo a Cristóbal Colón, a quien también tildaron de loco al momento de querer emprender su viaje al nuevo mundo.

¿Ven lo que pasa cuando uno estudia por Internet?

Por último, tenemos a Ossandón. Enumero: 

  1. No sabe lo que es el Acuerdo de París
  2. Votó a favor del mismo acuerdo
  3. Su señora confesó en una entrevista que no le tiene fe  
  4. Le dijo en la cara a una hija criada por madres lesbianas que él no era su candidato
  5. Cree que el conflicto mapuche puede resolverse con violencia. Cito: “Si hay que meter bala, hay que meter bala”.
  6. Su campaña es pésima y no da absolutamente ninguna idea además de pedir disculpas por lo expuesto anteriormente.

Los casos presentados demuestran que los candidatos presidenciales, a diputados, o personas que ya  cuentan con un cargo gubernamental en la derecha, no tienen idea del país en el que viven. No saben lo que es ser mujer y estar cansadas de de ser acosadas sistemática en la calle, en la televisión y en su casa; no saben lo que es tener que endeudarse con una carrera donde probablemente te paguen los justo para sobrevivir; no saben que existen diferentes tipos de familia y que todos se merecen una oportunidad en el país que componemos independiente de quién y cómo seamos.