El rebrote y confinamiento por COVID-19 vuelven a remecer China y ha obligado a todos a luchar por un pedazo de pan y leche, incluso a los multimillonarios. La situación quedó a la vista tras viralizarse un pedido de ayuda de una de las mujeres más ricas del mundo.
El pasado 9 de abril se registraron casi 20 mil casos entre los 25 millones de habitantes que residen en la ciudad que volvió al confinamiento. Estas nuevas restricciones han afectado a todos, incluso a los más ricos. Esto quedó claro luego de que se viralizara un mensaje de Kathy Xu Xin, conocida como “la reina del capital de riesgo de China”, en el que preguntaba cómo comprar pan y leche para su familia.
“¿Algún vecino puede incluirme en el grupo de compra de pan? Mi familia es muy grande. Necesitamos pan y leche. Gracias” decía el mensaje de la fundadora y presidenta de la empresa de inversiones Capital Today.
La empresaria, que ocupa el puesto 71 en el ranking de los mejores inversionistas de capital de riesgo del 2021 de Forbes, vive en un complejo de lujo en el distrito de Pudong de la ciudad y no tardó en recibir respuestas de asombro:
“¿Es usted, presidenta Xu?”, dijo una inversionista llamada Fiona Yu Fang.
“Pensé que solo nosotros, los administradores de fondos, teníamos problemas para comprar pañales. No esperaba que la hermana Xu Xin también necesitara unirse a grupos de compra”, escribió un hombre llamado Jackey, en WeChat.
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“Ella ha invertido en muchos negocios de ‘nuevo retail’ pero, al final, sigue teniendo que recurrir a esquemas de compras grupales”, escribió alguien en Weibo.
“Incluso los multimillonarios tienen que luchar por comida como nosotros… al fin hay un problema que no puede ser resuelto con dinero”, agregaron.
Aunque las compras online son una tónica en Shanghái, las aplicaciones ya no dan abasto con las compras individuales, esto porque sus equipos se redujeron drásticamente por los contagios y confinamiento que sus trabajadores han debido enfrentar, obligando a los clientes a formar grupos para adquirir suministros.
Más tarde, la empresaria publicó un mensaje diciendo sentirse avergonzada por la viralización de su petición en WeChat, agregando que su hijo “trajo compañeros de clase a mi casa para jugar. Hay 12 personas viviendo en la casa y el requerimiento diario de alimentos es grande, por lo que también participo en la compra del grupo comunitario”.
Después de todo -y por las dudas- Xu Xin también aclaró que logró comprar pan y leche.
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