Factores como cumplir con los requisitos para acceder a becas estudiantiles o la sobrecarga están afectando directamente en la salud mental de los adolescentes. Así lo confirmó la psicóloga Suzanne Bender en un artículo que escribió para un medio especializado, en el que advirtió sobre este fenómeno que ocurre en los colegios.
Es común que cuando se acerca la época de exámenes y pruebas en los colegios, los alumnos tiendan a dedicar más tiempo a actividades como estudiar o realizar trabajos, hasta el punto en que incluso reducen sus tiempos para necesidades como comer y dormir.
Aquello se intensifica aún más cuando estos jóvenes intentan cumplir con ciertos requisitos académicos para entrar eventualmente a una universidad u obtener beneficios como el de una beca, los cuales solo tienden a aplicar a los alumnos con las mejores calificaciones.
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Este fenómeno fue notado por la psicóloga experta Suzanne Bender, quien escribió un artículo para el medio especializado Psychology Today, en donde dice que ha visto cómo los estudiantes tienden a sobrecargar sus límites.
Un claro ejemplo que cita es el de una paciente suya, quien quería permanecer en una clase de honor en su colegio a pesar de que las exigencias estaban afectando fuertemente en su bienestar y salud mental.
Si bien, ella decía que no quería que su familia la retirara de esa clase avanzada, no se opuso en el momento en que la sacaron . Incluso, con el paso de las semanas expresó que estaba mucho más contenta y que, ante las consultas de sus compañeros que le preguntaban por qué se había ido, decía que sus padres la “obligaron a hacerlo” y que su vida pasó a ser “mucho mejor”.
Frente a esto, Bender destacó en su artículo que hay “dos mensajes para llevar a casa: un horario académico demasiado intenso puede causar daño psicológico. Además, nunca subestimes la necesidad de un adolescente de salvar las apariencias”.
Según el análisis de la experta, muchas veces pueden llegar a comentar sus esfuerzos con otros compañeros para mostrar el nivel de exigencia al que se están enfrentando, como una suerte de relación en la que asocian la complejidad a la que se enfrentan con la posibilidad de ver los frutos de su trabajo. En palabras de la académica, “la tensión psicológica se siente digna de la recompensa potencial”.
Pero junto con ello, también destacó que el hecho de que sobrepasen sus límites es fuertemente perjudicial para su salud.
“Se presentan en mi oficina con una variedad de síntomas durante el año escolar académico”, escribió en el medio especializado, “están demasiado cansados, irritables y disfóricos; pueden enfrentarse a una ansiedad debilitante o ataques de pánico”.
Es por esto, y por otros diversos motivos, que siempre es recomendable acudir a un especialista cuando sintamos que nuestra carga académica o laboral nos está sobrepasando. En este sentido, la ayuda profesional podría aportarnos a desarrollar herramientas para enfrentar cada situación, dependiendo de nuestras experiencias y objetivos personales.
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